Las lluvias de este fin de semana ocasionaron que se desgajara una barranca en Jolalpan, un municipio poblano que se ubica en los límites del estado con Guerrero.

La crecida del río y su posterior desbordamiento generaron una barrancada de agua que daño más de 130 viviendas, afectó a más de 400 pobladores, destruyó calles, bardas, casas y 5 puentes.

Es de señalar que estos puentes dejaron incomunicada a gran parte de la población ya que conectaban y eran el paso principal a escuelas, el mercado y la presidencia.

La acumulación del agua comenzó desde la noche del domingo, hubo ráfagas de viento con lluvia y la creciente del río aumentó por más de ocho horas.

La gran cantidad de agua rebasó el caudal del río, su fuerza hizo que éste se desbordara, destruyera las calles tirara árboles, postes de luz, teléfono y se llevara con su magnitud todo lo que encontró a su paso.

Con los primeros rayos de luz de este lunes, hombres, mujeres y niños se han sumado a la tarea de comenzar a limpiar sus casas que están azolvadas de tierra, lodo, piedras, ramas, troncos y animales muertos que dejó la crecida del río.

Fue alrededor del medio día de este lunes cuando personal del Sistema Estatal de Protección Civil (Seproci) llegó a Jolalpan para brindar el apoyo por lo que aún se desconoce si el Ejército Mexicano será requerido y aplicará el Plan DN III.

Durante este lunes, los pobladores trataron de rescatar de entre el lodo y el agua, algunos muebles y electrodomésticos, como camas, colchones, roperos, refrigeradores y lavadoras.

A través de un tuit la Secretaría General de Gobierno informó que se habilitará un albergue en Jolalpan en el corralón de la presidencia.