En medio de una creciente tensión social, habitantes de Xoxtla anunciaron nuevas acciones en defensa del agua que podrían incluir la vigilancia permanente del Pozo 4 y la convocatoria a una rueda de prensa este miércoles en el Zócalo de Puebla, donde expondrán la situación.
La convocatoria la realiza el Consejo Ciudadano Defensores de la Tierra y el Agua de San Miguel Xoxtla, con el objetivo de informar sobre el Cabildo del pasado 2 de junio.
En dicha reunión, afirmaron que la presidenta municipal, Guadalupe Ortiz Pérez, reiteró su intención de ratificar el convenio con el Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (SOAPAP), que buscaría ceder el 50 por ciento del agua del Pozo 4 a la ciudad de Puebla.
Pese a los esfuerzos de la edil por presentar el acuerdo como un “beneficio hídrico” para el municipio, la comunidad no se mostró convencida.
Decenas de vecinos que asistieron a la sesión informativa en el zócalo municipal expresaron su rotundo rechazo. “No hay agua suficiente ni para nuestra gente. ¿Cómo vamos a regalarla?”, cuestionaron algunos asistentes.
En respuesta, trascendió que se acordó mantener bloqueados los trabajos en el Pozo 4, impedir su operación con vigilancia comunitaria y planear nuevas manifestaciones.
Una de ellas podría ser una marcha desde Xoxtla hasta Casa Aguayo, sede del gobierno estatal, para exigir la cancelación definitiva del convenio.
Ambiente explosivo
La comunidad ya bloqueó la autopista México-Puebla durante más de siete horas a finales de mayo, provocando caos vehicular y visibilizando la crisis hídrica.
Ahora, con el fracaso del diálogo, las acciones podrían escalar ya que habitantes consultados advierten que no dudarán en tomar de nuevo las carreteras si no hay una solución justa.
En paralelo, se acusa al gobierno local de actuar sin transparencia, por lo que el Consejo Ciudadano que convoca a la rueda de prensa ha sido enfático: “Vamos a informar lo que realmente pasó el 2 de junio, porque nos quieren engañar. No vamos a permitir que se robe el agua del pueblo”.
El cartel que circula en redes sociales y vía WhatsApp denuncia directamente una “traición del gobierno” y llama a defender el agua como un derecho y un patrimonio de la comunidad y se anticipa que se dará a conocer la ruta de acción y los siguientes pasos de resistencia.
El conflicto no solo es por el agua, sino por la confianza quebrada entre gobierno y ciudadanía.
Observadores locales señalan que si bien la defensa del recurso hídrico es legítima, la polarización podría aislar al movimiento y dificultar un acuerdo regional para garantizar el abasto sostenible.
Mientras tanto, el Pozo 4 permanece bajo resguardo ciudadano y el municipio vive días de tensión, desconfianza y un rechazo generalizado a cualquier figura oficial.
En tanto, la autoridad municipal insiste en que el convenio traerá “beneficios” a la comunidad, los vecinos ya no confían y se preparan para defender lo que consideran suyo.
Locales advierten que la falta de disposición al diálogo también puede llevar al aislamiento del propio movimiento, y dificultar soluciones que garanticen agua para todos, tanto en Xoxtla como en la región metropolitana.
Mientras tanto, el pozo 4 permanece en vigilancia en medio de posturas que no se mueven ni un milímetro, el riesgo de confrontaciones mayores crece por día.