A unas horas de haber declinado a la búsqueda de la candidatura presidencial, el jefe de gobierno, Marcelo Ebrard, dijo que el costo de la congruencia es "posponer decisiones" y agradeció a sus seguidores por reconocerlo como un fuerte aspirante para los comicios de 2018.

Arropado por su esposa, Rosalinda Bueso, el mandatario capitalino confesó que la decisión de su declinación "fue muy difícil", sobre todo cuando no se logra lo que se había propuesto; pero dejó claro: "yo no me retiro de nada, sigue mi carrera política y no sólo pensamos en el 2012, vamos más allá”.

“Siempre es una decisión difícil, pero tampoco puedes tener la mezquindad de decir efectivamente ganó él tres y yo gane dos y luego yo ponerme a discutir la encuesta que yo mismo propuse, o sea, eso ya no se puede en nuestra vida política".

Entrevistado luego de su visita a la Clínica para la Obesidad y Enfermedades Metabólicas del Hospital General "Rubén Leñero", Ebrard Casaubon se dijo optimista.

"Si logramos que la izquierda vaya unida y bien organizada se van a tener muy buenos resultados y vamos a dar lugar a una izquierda diferente, es decir a que la izquierda tenga la autoridad moral y política para conducir al país como debe ser", aseguró.

Respecto a la propuesta del Frente Amplio, "le decía yo a Andrés Manuel, no es una negociación más que para eso". Se trata de respetar a los demás, no descalificar a todo aquel que no esté de acuerdo contigo o que piense distinto”.

“Respetar los acuerdos que se hacen aunque no nos guste el resultado, evitar la guerra de fracciones contra la izquierda que eso ya tuvimos, ya se nos agotó la paciencia, entonces lo que propuse fue eso", agregó.

manifestó que “yo lo que te diría, es el futuro, qué es lo qué hay que hacer. Primero tenemos que terminar todas las acciones del gobierno que tenemos ahorita, que son muchas”.

Indicó que él había dicho antes de que se diera a conocer la encuesta que si el resultado era favorable a Andrés Manuel “yo no estaría pensando en ser senador, diputado ni nada de eso. Yo me voy a quedar aquí hasta el último día de mi encargo que es diciembre de 2012”.

Después de eso, adelantó que se enfocará a construir una izquierda poderosa, unitaria, moderna y eficaz.

“Espero que el año que entra tengamos una izquierda que triunfe en las elecciones presidenciales, pero sea cual sea el resultado de la elección, el objetivo estratégico es ese construiremos y voy a participar ahí y voy a estar ahí".

"Me interesan mucho las causas de la gente, no tanto las preocupaciones de los políticos que luego son hasta aburridas, más bien, qué es lo que a la gente le está importando, cómo debemos hacerle para tener suficiente número de empleos, cómo vamos a tranquilizar al país, cómo vamos a construir la paz para que la gente esté tranquila, en eso voy estar, eso es lo que a mí me interesa".

De buen humor y semblante descansado, Ebrard Casaubon fue cuestionado sobre el significado de una pulsera roja de hilo, que porta en la mano izquierda.

"Me lo regaló Rosy, así la veo todo el día y me acuerdo de ella", comentó. ¿No es para el mal de ojo?, se le preguntó. No, ¿verdad?, dijo mirando a su esposa. Es un código femenino, el de los colores. Bueno, eso me lo regaló Rosy y muchas gracias", agregó.

La noche anterior, externó en tono de broma, viendo a Rosalinda, "no di lata realmente"; es decir, hay que asumir las decisiones y "tengo buen ánimo, soy optimista y no sé si más tranquilo porque sí me preocupa el futuro de mí país". (Notimex)