El IFE distribuye ahora “lápices para marcar las boletas”, cuya huella es fácil de borrar.
Si la marca no se hace con fuerza sobre la boleta electoral, basta con frotarla con un dedo para que desaparezca, explico Excélsior, después de tener acceso a los materiales electorales.
Frente a esta situación, varios ciudadanos, han cuestionado al IFE, a través de sus cuentas de Twitter, sobre si esto no representaría riesgo de que se manipule el sufragio.
Otros tuits expresan sus dudas y preguntas si cada ciudadano puede llevar su crayola para marcar la boleta.
Y otros más, sugirieron al órgano electoral una estrategia de difusión más oportuna y eficaz:
“@IFEMexico Hagan un comunicado de las características de los ‘lápices’ o ‘híbridos de crayola’ que van a utilizar para las votaciones”, planteó @AnnyChemy.
En respuesta, el árbitro electoral, también por medio de Twitter, explicó que se trata de un lápiz “con características similares a la crayola pero no se derrite y no se borra”. Expuso que el crayón se derrite en zonas cálidas.
Frente a la avalancha de dudas, aclaró que el ciudadano “puede marcar la boleta con el material que quiera llevar” y “no se anula el voto” si se utiliza un material distinto a los lápices que distribuye. Sin embargo, no especificó si cualquier marcador está permitido.
Dijo que “a veces la tinta puede tardar en secarse y a la hora de doblar la boleta se puede marcar en otra zona”.
Y para aclarar las dudas sobre el material electoral, indicó que cualquier ciudadano puede consultar la información a través de una solicitud de información, para lo cual puso a disposición el enlace http://www2.ife.org.mx/portal/site/ifev2/Obligaciones_de_Transparencia/.