El poeta Javier Sicilia acusó hoy al presidente mexicano, Felipe Calderón, de faltar a su palabra por "vetar" la Ley de Víctimas al devolverla al Congreso con observaciones fuera de plazo, una vez celebradas las elecciones.

Calderón "está faltando a su palabra" y "un hombre que falta a su palabra no vale nada", aseguró en una rueda de prensa en la capital mexicana el dirigente del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD).

Sicilia reaccionó así a la devolución de la Ley de Víctimas que obliga al Estado a proteger, asistir y reparar el daño a las víctimas de la delincuencia y abusos de derechos humanos, para que el Congreso aclare varios puntos del proyecto.

Entre ellos, que se precise a nivel constitucional que la atención de las víctimas no es solo responsabilidad del Gobierno federal, sino también del nivel estatal y municipal.

Emilio Álvarez, integrante de MPJD, afirmó que las observaciones del Ejecutivo pudieron haberse presentado antes y no el 1 de julio a las 20.26 hora local (01.26 GMT), fuera del plazo establecido, y cuando además ya se habían cerrado las casillas en "un manejo de los tiempos con un perverso uso electoral".

Dado que "Calderón no quiso vetar la ley en el marco del proceso electoral", se realizó un procedimiento "fuera del marco legal", que se saldó con el "secuestro" de la iniciativa durante 20 días, "en una acción conjunta entre el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados y la secretaría de Gobernación", aseveró.

Exhortó al Ejecutivo a que publique ya la Ley General de Víctimas en el Diario Oficial y advirtió que, de no hacerlo, se estará cometiendo una flagrante violación constitucional.

El exombudsman de la capital mexicana hizo esta afirmación en virtud de la norma que establece que se dará por aprobado todo proyecto que no haya sido devuelto por el Ejecutivo a la cámara de origen con observaciones dentro de los 30 días naturales siguientes a su recepción.

Sicilia, por su parte, consideró que el "veto" del Gobierno, además de demostrar el "desprecio por las víctimas", refleja la "lejanía absoluta entre la clase política y la realidad" de México, así como la falta de voluntad para "querer ver que lo que pasa en el país es mucho más que inseguridad y delincuencia".

Ironizó que el Gobierno no puede estar censurando la Ley de Víctimas porque no haya suficientes recursos para redimir económicamente a los decenas de miles de afectados cuando sí hay dinero para una guerra o elecciones.

"Calderón ha traicionado demasiado a este país como para seguir haciéndolo. Así que no le pido, le exijo que cumpla con su palabra", agregó Sicilia, quien señaló que con esta "falta de palabra" está "perdiendo la confianza" de la ciudadanía.

Reclamada por agrupaciones de víctimas de la violencia, la Ley de Víctimas obliga al Estado a garantizar la asistencia jurídica, médica y económica a quienes sufran ataques de la delincuencia o abusos por parte de las autoridades, y a reconocer su derecho a la verdad y la justicia, así como a un reparación integral del daño.

La iniciativa ya había sido aprobada a finales de abril por la Cámara baja, avalada antes por el Senado, y solo necesitaba la promulgación del presidente para su entrada en vigor.

Con la devolución del Ejecutivo, los legisladores ahora deberán analizar las observaciones sugeridas, primero en comisiones y después en el pleno de ambas Cámaras, en receso hasta septiembre, cuando empezará a funcionar el Congreso elegido el domingo pasado en las urnas.

Desde la llegada al poder del conservador Felipe Calderón el 1 de diciembre de 2006, unas 50,000 personas han perdido la vida en enfrentamientos entre los carteles y de estos con las fuerzas de seguridad, una cifra que el MPJD eleva a 60,000 personas.