La cadena estadounidense confirmó que comenzará a vender sus bebidas en su máquina monodosis Verismo. Así, competirá en un segmento con rivales como Nestlé y Kraft.

Starbucks no se quiere quedar afuera del negocio de las cápsulas de café. A través de su cafetera Verismo, este año librará esta batalla en el hogar de sus consumidores para competir con Nestlé, Sara Lee, Kraft Food y las italianas Illy y Lavazza. En 2011 ya se había aliado con Mountain Coffee para la venta de cápsulas de café y té.
 
"Es una gran apuesta que estamos haciendo", dijo el CEO, Howard Schultz, que apunta a ingresar al mercado de US$ 8 mil millones. 
 
"Starbucks está cambiando la forma en que los consumidores toman el café en casa con el debut de su máquina nueva, Verismo System", dice la firma en su sitio. Los modelos se venderán en las tiendas de Starbucks en octubre por US$ 199 y US$ 399, pero por ahora se pueden ordenar desde el sitio de la compañía. 
 
"Es la próxima evolución de la cultura del café en los Estados Unidos", dice un analista. Green Mountain Coffee Roasters, con sus máquinas Keurig, llegan a 11,5 millones de hogares y representan alrededor del 90% del mercado de una sola porción en los EEUU. Nestlé también planea actualizar sus máquinas Nespresso.
 
La cadena estadounidense que impuso el café "al paso" muestra que no le da la espalda a una nueva tendencia que se fortalece en el mercado.
  
Casi tres de cada cuatro clientes de Starbucks aún no posee un sistema de monodosis, puntualizó Schultz al USA Today."El segmento creció un asombroso 168% en el último año", indicó Jeff Hansberry, ejecutivo de la firma. "Los consumidores quieren tener la posibilidad de elaborar un rico café espresso desde una sola máquina, con sólo pulsar un botón", agregó.