Sonriente, Obama descendió a paso presuroso a las 12:10 horas por la escalerilla de acceso de la aeronave mientras que sus acompañantes descendían por la puerta trasera como su asesora en materia de Seguridad, Susan Rice.

En tierra firme le esperaba el secretario de Relaciones Exteriores de México, José Antonio Meade así como el embajador Alfredo Pérez Bravo, jefe de Protocolo y el representante de EU en nuestro país, Anthony Wayne.

Tras los saludos protocolarios, rodeados por un regimiento del Ejército Mexicano, el mismo Obama convidó al canciller Meade a subirse a su vehículo denominado "La Bestia", mientras que poco más de 20 agentes de seguridad visibles tanto de la Unión Americana como de México se cercioraban que no hubiera incidente alguno.

"La Bestia" tomó la parte lateral de la aeropista y junto a seis vehículos perfectamente vigilados se encaminaron hacia la salida para concurrir al Palacio de Gobierno de Toluca en donde el presidente Enrique Peña Nieto, al filo de las 12:35 horas le esperaba para sostener una conversación bilateral dándole la bienvenida al distinguido visitante.