El presidente Enrique Peña Nieto llamó a gobernadores y autoridades a estar "atentos" a la temporada de huracanes, porque será "muy activa" y los tres órdenes de gobierno deben estar "muy preparados" para mantener una comunicación constante y articular esfuerzos con la prioridad de proteger la vida de los mexicanos.
"Sin ánimo de preocupar ni generar alarma: debemos tener presente que dos terceras partes del territorio nacional tienen un riesgo sísmico significativo, hay 31 volcanes potencialmente activos y nuestro territorio está expuesto al surgimiento de huracanes en dos océanos", dijo durante la clausura de la Convención Nacional de Protección Civil.
Con la presencia de 25 gobernadores, el mandatario convocó a actuar en corresponsabilidad porque sólo así es posible reducir los riesgos y daños asociados a fenómenos naturales y accidentes que amenazan la vida e integridad de los mexicanos.
"Es con prevención y coordinación como debemos y podemos mitigar los efectos de un efecto perturbador", expuso.
Destacó la importancia de esta Convención Nacional de Protección Civil porque permitió trazar una "hoja de ruta" hacia dónde se tiene que caminar para fortalecer las capacidades como Estado en favor de la protección civil.
Además que "nos hacen más conscientes de lo mucho que podemos hacer para proteger a nuestra población". "Tengamos presente que construir un México seguro, menos vulnerable, es una responsabilidad que todos, sociedad y gobierno, compartimos", explicó.
Recordó que hace ocho meses Acapulco y diversas de Guerrero, así como otras entidades del territorio nacional, experimentaron los efectos destructivos de los ciclones Ingrid y Manuel.
Dicho episodio "nos recordó de manera contundente la importancia que tiene la protección civil para salvar las vidas y proteger el patrimonio de miles de mexicanos".
No obstante los cuantiosos daños sufridos, ambas contingencias también dejaron constancia de los resultados positivos que se pueden lograr con el trabajo coordinado entre los distintos órdenes de gobierno, precisó.
Advirtió que desafortunadamente este tipo de fenómenos naturales no son hechos aislados. Entre 2000 a 2012 diversos desastres afectaron aproximadamente a más de un millón 169 mil viviendas y tuvieron un impacto económico negativo estimado en más de 22 mil millones de pesos.
Esto se debe en gran medida a las condiciones geográficas, geológicas, climatológicas del país que lo exponen a una amplia variedad de fenómenos con alto potencial destructivo. "Conscientes de estas condiciones de vulnerabilidad, la Protección Civil ocupa un lugar prioritario para esta administración", detalló.
Insistió en la importancia de esta sesión del Consejo Nacional de Protección Civil, toda vez que permite a poderes, autoridades y sociedad alinear objetivos y coordinar acciones a partir de tres premisas fundamentales.
La primera, indicó, es una gestión integral de riesgos para identificar en la medida de lo posible, controlar o mitigar las acciones; y la segunda la coordinación y corresponsabilidad de los tres órdenes de Gobierno y de los sectores público, privado y social.
La tercera premisa, señaló, es privilegiar la prevención, la respuesta inmediata y la mitigación temprana de las afectaciones.
"La lógica detrás de estas premisas es muy clara: una sociedad previsora, con autoridades coordinadas, siempre será una sociedad más segura", agregó el presidente.
Áñadió que para llevar a la práctica esos preceptos son esenciales dos instrumentos. Por un lado el reglamento de la Ley General de Protección Civil, publicada esta semana en el Diario Oficial de la Federación.
Ese instrumento legal establece las bases para un Sistema de Protección Civil moderno, ágil y eficiente, al normar la coordinación y colaboración entre el Ejecutivo Federal, las autoridades locales y los sectores social y privado antes, durante y después de una situación de emergencia, comentó.
También prevé la creación de sistemas de monitoreo y alerta temprana y, de igual manera, orienta la participación de los medios de comunicación en la difusión oportuna de mensajes de alertamiento para la población.
Igualmente este ordenamiento contempla reglas claras y sencillas que facilitan el acceso a recursos financieros que se destinen a medidas preventivas.
El segundo instrumento para articular la acción del Estado mexicano en materia de protección civil es el Plan Nacional de Respuesta, que estará en operación ya este mismo año, adelantó.
Mencionó que esa plataforma habrá de incorporar y alinear el Plan DN-III, el Plan Marina y el Plan de Apoyo a la Protección Civil de la Policía Federal.
Asimismo los planes de respuesta de diversas dependencias y entidades de la Administración Pública, incluyendo los de Petróleos Mexicanos, Comisión Federal de Electricidad y la Comisión Nacional del Agua.
"Este instrumento de planeación integral permitirá que las grandes emergencias sean atendidas con una mayor coordinación y eficacia institucional, aprovechando los recursos y las capacidades de todas las dependencias del Gobierno de la República", manifestó.
Sin embargo, sostuvo que por más importantes que sean los esfuerzos que realicen los distintos órdenes de gobierno siempre podrán ser más útiles y efectivos si todos los sectores de la sociedad asumen y hacen su parte.
"En materia de Protección Civil debemos ir juntos sociedad y gobierno, practicando y difundiendo, cada uno desde su ámbito de actuación, una amplia cultura de prevención y respuesta oportuna", subrayó.
Pidió a las autoridades trabajar coordinadamente, monitoreando y detectando riesgos, lo mismo que informando a la población con oportunidad.
Por su parte exhortó a la sociedad a estar atenta, informarse y conocer los procedimientos a seguir ante cada eventualidad, incluyendo los huracanes, cuya temporada acaba de iniciar.
Gloria Islas Rodríguez. Enviada - Notimex