Las senadoras Laura Angélica Rojas y Gabriela Cuevas, del PAN, señalaron que el anuncio hecho ayer por el presidente Enrique Peña Nieto ante la Asamblea General de las Naciones Unidas es un mensaje claro del compromiso de México con los esfuerzos de pacificación de la organización.
Al asumir sus "deberes internacionales en el mantenimiento de la paz", México demuestra su congruencia con el peso que tiene a nivel global no sólo "en lo retórico o financiero", señalaron.
Recordaron que su partido ha impulsado esa propuesta desde el Gobierno del presidente Vicente Fox (2000-2006) y en la actual legislatura ha presentado cuatro iniciativas, incluida una de reforma constitucional, para abrir la puerta a la participación de México en misiones de la ONU.
Sin embargo, aclararon que el Senado ejercerá sus facultades de control en materia de política exterior, por lo que pedirá a la cancillería que explique en detalle la participación de México en las Operaciones de Mantenimiento de la Paz (OMP).
El coordinador de los senadores del PAN, Jorge Luis Preciado, dijo que si bien es una demanda histórica de su partido, la participación mexicana "debe ser gradual".
Se pronunció en favor de una participación de México en operaciones humanitarias, "es decir, cuando haya alguna catástrofe", pero en cuanto al envío de tropas dijo que hay que ser "muy cuidadosos" porque hay que "apagar los fuegos internos antes de pensar en una situación externa".
El senador Alejandro Encinas, del PRD, consideró la decisión un "error" y una regresión de lo que ha sido un pilar de la política exterior mexicana: el respeto a la autodeterminación de los pueblos.
No obstante, respaldó la participación de México en situaciones de desastres naturales, pero "no en temas que impliquen violencia".
Soldados serían enviados a zonas de conflicto
El presidente Enrique Peña Nieto anunció que México se sumará a las operaciones de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz, mediante acciones humanitarias en beneficio de la población civil, incluso con el envío de tropas a zonas de conflicto.
Durante su intervención en la 69 Asamblea General de la ONU dijo que México, “como actor responsable”, da un paso histórico en su compromiso con este organismo.
La Presidencia precisó que la participación será gradual en términos cuantitativos y labores, y puede comprender personal militar o civil “para una amplia gama de tareas”.
Las labores pueden involucrar a ingenieros, médicos, especialistas en derechos humanos y observadores políticos y militares.
Sin embargo, sólo participará si hay autorización expresa y un mandato claro del Consejo de Seguridad de la ONU, consentimiento y cooperación del Estado en donde se desplegará la operación, conformidad con el marco jurídico nacional y prioridades de la política exterior y que sean tareas humanitarias.
Senadores del PRI y PAN respaldaron la decisión, que para el PRD es precipitada. Especialistas indicaron que el anuncio es tardío, pero reposicionará al país en el exterior.
Fuente: El siglo de Torreón
Foto: CNN México
