La secretaria de Energía, Rocío Nahle, descartó este miércoles cualquier negociación con "hackers" y dijo que "no se va a pagar"  los 4,9 millones de dólares que piden los delincuentes informáticos que el fin de semana afectaron el sistema informático de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).

La funcionaria minimizó lo ocurrido, toda vez que aseguró que las grandes empresas no están exentas de un posible ataque cibernético.

"Pemex, como las grandes empresas, en todo el año están a expensas a hackeos, a virus y efectivamente, gente de comunicaciones está atendiendo el tema desde el domingo. Informática es lo que está haciendo, no se va a pagar, Pemex es una empresa seria, ya está la gente de informática en ello", dijo a la prensa de Boca del Río, en Veracruz.

Nahle añadió que hasta el momento no se ha identificado la forma en la que las computadoras fueron infectadas o de dónde proviene el ataque.

Las declaraciones de la funcionaria ocurren dos días después de que Pemex aclaró que el domingo 10, sólo "recibió intentos de ataques cibernéticos que fueron neutralizados oportunamente", aunque sí llegó a afectar el 5 % de los equipos personales de cómputo.

México es el país más afectado por ataques cibernéticos con un 82 por ciento, mientras que Japón es el menos impactado con un 24%, de acuerdo con la encuesta global "The Impossible Puzzle of Cybersecurity".

El reporte, elaborado en agosto pasado por Sophos, asegura  que más del 55 por ciento de las empresas mexicanas fueron víctimas de ciberdelincuentes.

Además, los ataques más representativos a nivel mundial y en el país sucedieron principalmente a través del phishing propagado en correos electrónicos y sitios web maliciosos. 

Con información de Xinhua.