Autoridades de Tamaulipas anunciaron la detención de 12 policías estatales por su presunta participación en el asesinato de 19 personas, entre ellas varios migrantes guatemaltecos, quienes fueron baleados y calcinados cerca de la frontera con Estados Unidos.

El fiscal general del estado de Tamaulipas, Irving Barrios Mojica, indicó que los elementos enfrentan cargos de homicidio, abuso de autoridad y falso testimonio.

Los cuerpos fueron hallados en una camioneta calcinada en Camargo, al otro lado del río Bravo frente a Texas, en una zona en disputa entre los restos del Cártel del Golfo y el antiguo Cártel de Los Zetas. En el lugar se localizó otro vehículo también quemado pero sin cadáveres y con placas del estado de Nuevo León.

De los 19 cuerpos, 16 eran de hombres, uno era de una mujer y los otros dos estaban tan consumidos por el fuego que no se pudo determinar su género. Por el momento sólo cuatro han sido identificados, dos guatemaltecos y dos mexicanos, aparentemente vinculados al tráfico de migrantes.

El vehículo con los cadáveres tenía 113 disparos, aunque apenas fueron hallados algunos casquillos en el lugar, por lo que “cobra fuerza la teoría de la alteración de la escena del crimen debido de la ausencia de casquillos y municiones", afirmó el fiscal.

Barrios detalló que las víctimas iban en un convoy más grande de vehículos que llevaban a migrantes de Guatemala y El Salvador a la frontera de Estados Unidos y no descartó que el motivo de los asesinatos pudiese ser una disputa entre cárteles que luchan por el territorio y el derecho a cobrar a los traficantes de personas por pasar por sus zonas.

También, el Instituto Nacional de Migración (INM) anunció el cese de ocho de sus agentes por “la omisión en los procedimientos administrativos y protocolos establecidos en la Ley de Migración y su reglamento, al retener la camioneta” involucrada en una redada contra migrantes en diciembre y que en enero apareció junto al vehículo con los cadáveres.

El Ministerio de Relaciones Exteriores guatemalteco dijo que está “atento a los avances de la investigación” y solicitó a México "que aplique todo el peso de la ley a los responsables de los sucesos tan lamentables que enlutan a familias guatemaltecas”.

Con información de AP.