La Secretaría de Relaciones Exteriores confirmó la llamada telefónica entre el canciller mexicano Marcelo Ebrard y el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España, José Manuel Albares, luego de los señalamientos del presidente Andrés Manuel López Obrador de poner “en pausa” las relaciones bilaterales.
Sin entrar al detalle de la conversación, fuentes diplomáticas puntualizaron que el tono de la plática fue respetuoso.
Este jueves, el gobierno de Pedro Sánchez rechazó “tajantemente las descalificaciones” expresadas por el mandatario mexicano respecto a una supuesta complicidad ocurrida en el periodo neoliberal entre empresas y el entonces poder político español para abusar de México.
“El Gobierno de España rechaza tajantemente las descalificaciones realizadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en los últimos días contra España y las empresas españolas”.
A través del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, recordó que ambas naciones son socios estratégicos, unidos por profundos lazos humanos, culturales, históricos, lingüísticos y económicos.
Indicó que ello se deja ver en los más de 175 mil españoles que viven en México y cerca de 30 mil mexicanos que residen en territorio ibérico. En cuanto a cooperación económica destacó que son el segundo inversionista en nuestro país con alrededor de 7 mil empresas que invierten 70 mil millones de euros anuales y la inversión mexicana en España supera los 25 mil millones.
“España trabajará siempre por mantener las mejores relaciones con México y reforzar los lazos con este pueblo hermano. El Gobierno desea unas relaciones basadas en el respeto mutuo, como quieren los españoles y los mexicanos, sin este tipo de manifestaciones”, sostuvo.