A nombre del Grupo Parlamentario del PVEM, la diputada Janine Patricia Quijano Tapia, llamó a la Fiscalía General de Jalisco a realizar una investigación exhaustiva, imparcial y con perspectiva de género para sancionar al responsable material del feminicidio contra Luz Raquel Padilla Gutiérrez y se castigue también a funcionarios estatales y municipales, responsables de omisión.

En un comunicado, la legisladora informó que presentó un punto de acuerdo, ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, para que el Poder Legislativo haga un exhorto a la Fiscalía estatal en ese mismo sentido, “y se haga justicia a Luz Raquel, quien era madre de un niño con espectro autista".

Asimismo, para que realice las indagaciones necesarias para castigar a los funcionarios de la Fiscalía que hicieron caso omiso de diversas denuncias de la víctima, “provocando la consumación del abominable crimen”.

La diputada refirió que Luz Raquel Padilla había denunciado ante las autoridades, las amenazas de su vecino, quien, incluso, escribió que la iba a quemar viva en una de las paredes del edificio donde vivía. “Además, existían denuncias por las diversas agresiones de las que había sido objeto; en una ocasión, la habían atacado con cloro industrial debido a que se quejaban de que su hijo gritaba mucho".

Quijano Tapia resaltó que la publicación de sus agresiones en sus redes fue una visibilización de la violencia que sufría y a pesar de contar con heridas visibles, corroboradas por personal médico, Luz Raquel fue doblemente víctimizada por las autoridades quienes declinaron actuar de forma eficaz ante los hechos de violencia que ella denunció.

Aunado a lo anterior, dijo, Luz Raquel contaba con una orden de restricción contra su agresor, misma que concluyó a principios de este mes de julio, mientras que la dependencia encargada de proteger a menores con discapacidad en el estado de Jalisco dejó de atender a su hijo.

La agresión contra Padilla Gutiérrez ocurrió el pasado 16 de julio a plena luz del día en un parque cerca de su domicilio, en el municipio de Zapopan, donde sus agresores le prendieron fuego y días después falleció a causa de este atroz hecho.

“El caso de Luz Raquel Padilla no sólo es un feminicidio, es además un caso de odio y discriminación hacia su hijo”, señaló Quijano Tapia.

“Todos le fallamos a Luz Raquel y a su hijo: el sistema de apoyo a las personas con alguna condición especial, que dejó de prestarle apoyo; las autoridades con sus omisiones, que no quisieron actuar pese a las amenazas que recibió; su entorno comunitario que no fue ni solidario ni comprensivo frente al padecimiento de su hijo; los gobiernos estatal y municipal que intentaron deslindarse de cualquier responsabilidad y la sociedad en su conjunto que ha permitido que casos como este sigan sucediendo”, lamentó.