Germán Martínez Santoyo, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), indicó que la emergencia por escasez de agua en Monterrey, Nuevo León, podría prolongarse hasta finales del 2023, pues las lluvias que se esperan este agosto y septiembre apenas empezarían a llenar las presas.
En una entrevista con el diario El País, el funcionario explicó que obras como la nueva presa Libertad y el segundo acueducto a El Cuchillo (cuya construcción podría ascender hasta los 15 mil 750 mdp), permitirán ampliar la captación de agua superficial. Sin embargo, estarán en operación hasta diciembre del año entrante.
Martínez explicó que las lluvias de agosto y septiembre “empezarían a llenar las presas, pero no se van a llenar todas este año”.
Mientras tanto, el Gobierno del Estado, que encabeza Samuel García, refuerza los trabajos de inspección y limpieza que se realizan en los ríos El Camacho y El Pablillo, los cuales desembocan en la presa Cerro Prieto.
"Esos dos ríos estaban invadidos de pozos ilegales, invadidos de ranchos, de plagas y obviamente pues muy manipulados… al dejarlos limpios y listos, vamos a dejarlos preparados para cuando llegue lluvia”, explicó el Gobernador, quien ayer domingo encabezó una jornada de supervisión de los trabajos.
Para hacer frente a esta crisis, según José Luis Luege Tamargo, extitular de la Conagua, explicó en una entrevista con ABC Noticias, que lo más urgente es establecer una agenda de trabajo a largo plazo enfocada en el intercambio total de agua tratada para agua de riego y para servicios urbanos y para uso industrial.
Con información de Excélsior.