El proceso de desafuero contra Cuauhtémoc Blanco, exgobernador de Morelos y actual diputado federal por Morena, enfrenta obstáculos en la Cámara de Diputados debido al respaldo de legisladores oficialistas.
El pasado 6 de marzo, la Sección Instructora, encargada de analizar las solicitudes de desafuero, rechazó iniciar el proceso contra Blanco, acusado de intento de violación por su media hermana.
La votación culminó con tres votos en contra y uno a favor, con los diputados de Morena y del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) oponiéndose a la admisión del proceso, mientras que el representante del Partido Acción Nacional (PAN) votó a favor.
La denuncia contra Blanco fue presentada en octubre de 2024 por su media hermana, quien lo acusa de intento de violación en diciembre de 2023, durante su mandato como gobernador de Morelos. La Fiscalía del estado solicitó el desafuero del diputado para proceder legalmente en su contra.
El presidente de la Sección Instructora, Hugo Eric Flores, aseguró que el proceso se llevará a cabo respetando el debido proceso y que la Fiscalía deberá probar las acusaciones. Sin embargo, la negativa a iniciar el proceso de desafuero ha generado críticas por parte de la oposición, que acusa al oficialismo de proteger a Blanco y obstaculizar la justicia.
La destitución del fiscal de Morelos, Uriel Carmona, quien solicitó el desafuero de Blanco, ha añadido complejidad al caso.
Carmona fue removido de su cargo por el Congreso estatal horas después de presentar la solicitud, lo que ha sido interpretado por algunos sectores como una represalia política.
La situación ha generado un debate sobre el compromiso del partido gobernante en la lucha contra la corrupción y la impunidad, especialmente cuando se trata de figuras políticas de alto perfil.
