El secretario de Economía federal, Marcelo Ebrard, calificó como "injusto" el reciente incremento al 50 por ciento del arancel impuesto por Estados Unidos a las importaciones de acero, medida que ha provocado una reducción del 50 por ciento en las exportaciones mexicanas del sector.
Ebrard anunció que el gobierno mexicano solicitará formalmente el próximo viernes 6 de junio la exclusión de México de esta política comercial.
La medida estadounidense, implementada por la administración del presidente Donald Trump, busca incentivar la producción nacional de acero y aluminio.
Sin embargo, ha generado preocupación en México, segundo proveedor de estos materiales al mercado estadounidense, debido al impacto negativo en las exportaciones y en sectores clave como la industria automotriz, electrónica y de la construcción.
Ebrard expresó su intención de negociar una exención similar a la otorgada al Reino Unido, argumentando que el arancel del 50 por ciento es excesivo y perjudica a ambas economías.
Además, señaló que México ha implementado medidas para frenar las importaciones de acero chino, lo que debería ser considerado en las negociaciones con Estados Unidos.
El gobierno mexicano continúa evaluando las implicaciones de esta medida y las posibles acciones a seguir para proteger los intereses de su industria siderúrgica y mantener una relación comercial equilibrada con Estados Unidos.