En la víspera de la realización del primer debate entre los candidatos a la presidencia de la república, programado para la noche de mañana domingo, la analista política de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UAEP), Claudia Ramón Pérez, aseguró que la ventaja que tiene el aspirante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), según las encuestas, lo convierten indiscutiblemente en el más vulnerable de los cuatro aspirantes.

Ante eso, la académica de esa institución poblana, afirmó que los candidatos que están en el segundo y en el tercer lugar, buscarán recuperarse en el debate del domingo, pero todavía falta ver hasta qué punto será decisivo ese primer encuentro organizado por el Instituto Federal Electoral (FE).

La politóloga de la UPAEP dijo que la percepción social, indica que Peña Nieto, no entrará a la confrontación con sus oponentes, “de los cuatro candidatos, el más agresivo puede ser Andrés Manuel López Obrador, porque además, está interesado en recuperar puntos para crecer, le apuesta mucho al debate, contrario a lo que sucedió en el 2006, cuando era puntero”.

Lo que percibe la investigadora de esa casa de estudios, es que la aspirante panista, Josefina Vázquez Mota, y el candidato de los partidos de izquierda, buscarán desdibujar al priista, “aunque creo que puede ser más agresivo López Obrador y el que tiene mucho que ganar es Gabriel Quadri de la Torre, quien busca conservar el registro de su partido”, porque puede generar propuestas y con ello, posicionarse.

Ramón Pérez no encuentra posibilidades de sorpresas, pero para que así se mantengan las cosas, es importante el formato del debate, porque en otros países se abren muchas posibilidades de juego, que permite llegar a la confrontación, “en México es difícil alcanzar una situación similar”, por eso agregó, Peña Nieto no quiere debatir, porque eso lo hace vulnerable y un tropezón le pega en la tendencia electoral”.

Desde la perspectiva de Claudia Ramón Pérez, en el momento actual, en México no encuentra posibilidades de que se repita una situación similar a la del 2006, porque para el primer debate, se condicionó poner por delante las propuestas de los candidatos y se prohibieron las descalificaciones, “por eso creo que es importante trabajar en una mejor cultura política, para que los ciudadanos con derecho de votar, puedan contrastar las propuestas de los diferentes candidatos y tomen una mejor decisión al momento de acudir a las urnas, pero eso se logra, con la confrontación abierta de las ideas”.