El pasado 15 de enero se puso en funcionamiento el Sistema RUTA en Puebla aun sin haberse culminado los paraderos de Amalucan, Bosques de San Sebastián, Galaxia Amalucan y Santa Margarita.

Pero a casi un mes de que iniciara el funcionamiento del peculiar sistema de transporte, fecha que coincidió con el segundo informe de gobierno estatal, aun se realizan obras en algunos paraderos, lo que exige que el paso de camiones articulados se realice con suma precaución para evitar que sufran algún desperfecto.

Además, en esta zona de desarrollo poblacional creciente, apenas se construyen los puentes peatonales.

Si bien la infraestructura desde Tlaxcalancingo hasta llegar a plaza Loreto está casi terminada, salvo el paradero Matamoros el cual se encuentra cerrado y que será abierto hasta que se construya el puente peatonal que cruza el bulevar Atlixco y la avenida Matamoros.

En las estaciones del metrobús que se ubican en la Rivera Anaya, en la zona de Amalucan y las estaciones cercanas a Bosques de San Sebastián la infraestructura del metrobús está incompleta. Las estaciones que se encuentran sobre la avenida Defensores de la República no tienen inconvenientes.

En algunas de las terminales del norponiente se construyen los muros que dividen al metrobús de la calle o de alguna unidad habitacional.

Más severo aun, es la falta de puentes peatonales. La mayoría de los mismos en esta zona densamente poblada están en construcción. En las estaciones ubicadas en los Capulines, Bosques del Pilar, Santa Margarita y Amalucan.

Además, la avenida Xonacatepec cruza la ruta del metrobús, que a pesar de los señalamientos no hay semáforos.

El metrobús disminuye su velocidad y toca en repetidas ocasiones su bocina para anunciar su paso esperando que los arriesgados conductores cedan el paso al vehículo.

Por si esto fuera poco los ciclistas toman los carriles confinados para trasladarse entre estas colonias ante la ausencia de calles pavimentadas y en buen estado.


Es decir, que aunado a la puesta en marcha de este sistema de transporte sin contar con la infraestructura terminada, se suma la deficiente cultura vial de automovilistas, peatones y ciclistas.

La afluencia de los usuarios es menor que en los días en que se puso en marcha de manera gratuita el Sistema RUTA.

En los paraderos no hay máquinas automatizadas para la venta de tarjetas como sucede en otros sistemas de transporte.

La compra de tarjetas se hace directamente en las estaciones del metrobús donde se encuentra el personal del Sistema RUTA. Ahí mismo, ocupando una laptop y un lector electrónico se carga la tarjeta del metrobús.

De manera afable, el personal entrega la tarjeta y enseña cómo colocarla en un lector electrónico colocado en el anden:

“Solo tiene tres segundos para pasar”, advierte el trabajador de RUTA.

“Si no debe volver a pagar”, sentencia el empleado.

Los usuarios del sistema de transporte intentan habituarse a los nuevos lectores de tarjetas.

De acuerdo al reporte “Saturación Vehicular en Puebla” de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) ha crecido el número de poblanos que cuentan con un vehículo, es decir, que hay un vehículo por cada cuatro poblanos.

El uso de vehículos automotores produce mayor gasto de gasolina, eleva las temperaturas y genera mayor tránsito vehicular.

En contraparte la tendencia mundial es reducir el uso del transporte personal mejorando los sistemas de transporte masivo y público en distintas modalidades, situación que no se ha dado en Puebla en las últimas décadas sino que se ha promovido el modelo de transporte público concesionado “hombre-camión” inundando la ciudad con combis y microbuses, sin que se ocupen ejes troncales que diseminen el tránsito de autobuses, ocupando rutas ramificadas.

El primer corredor que fue seleccionado para la construcción del Sistema RUTA es el Chachapa-Tlaxcalancingo que cruza la zona metropolitana de Puebla de nororiente a surponiente, uniendo a través de dicha vía de transporte los municipios de Amozoc y San Andrés Cholula.

En el norponiente de la ciudad los trabajos que realizan para terminar las obras en algunos paraderos del metrobús afectan el paso de los vehículos articulados. En algunas terminales, los trabajadores realizan a marchas forzadas el trabajo de colocación y soldadura de puentes peatonales.

Además se han tirado y se han vuelto a colocar muros y mallas. Sin embargo, las obras que se realizan alteran el paso del metrobús, en especial, de los llamados vehículos articulados.

Los puentes peatonales aun no están listos aunque los habitantes de esta zona de la ciudad ocupan el sistema de transporte.

En los autobuses se carece de señalética sobre las paradas del metrobús. Es decir, no hay un mapa o gráfica que indica las paradas del mismo, como sucede en otros sistemas de transporte.

Las escaleras metálicas en la parada Juárez Serdán no funcionan. El ascenso y descenso en el viaducto que se terminó de construir en el 2004 se hace por las escaleras metálicas.

Otro rasgo visible es la ausencia de la cultura vial de los habitantes de la ciudad de Puebla. Los automovilistas ocupan por algunos instantes los carriles confinados cuidándose de no ser multados por elementos de Tránsito Municipal.

En la terminal de Hermanos Serdán el mismo personal de RUTA señala que los agentes de Tránsito asignados a esa terminal, donde da vuelta a la derecha el metrobús no prestan atención cuando los automovilistas invaden los carriles confinados.

Por ejemplo, las personas caminan sobre los carriles confinados. Peor aun, jóvenes y niños en bicicletas ocupan los carriles para transitar porque las calles cercanas son prácticamente inexistentes en una de las zonas más pobres de la ciudad.

A unos pasos de las últimas estaciones del metrobús, casi llegando a Chachapa, son visibles las casas de mampostería. Se trata de una zona donde apenas llegan los servicios públicos.

El metrobús le cambió la vida a una zona casi olvidada de la ciudad. A la que normalmente los grupos políticos acuden en busca de votos cautivos a través del clientelismo. Las bardas de la pasada campaña electoral 2010 no están despintadas, algunas bardas todavía recuerdan al entonces candidato a la gubernatura por la mega-alianza de partidos, Compromiso por Puebla.

En la última estación ubicada en Chachapa solo algunas personas se bajan.

Aunque las estadísticas son frías al cruzar por las últimas paradas del metrobús se hace eco de las cifras dadas a conocer por el Consejo Nacional de Evaluación (Coneval) que en su más reciente estudio señaló que en el municipio de Puebla hay 732 mil poblanos que viven en situación de pobreza.

La versión oficia
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Durante su comparecencia este viernes, el secretario del Transporte, Bernardo Huerta Couttolenc defendió la obra y avizoró que con el respaldo del gobierno estatal, de diputados y de la sociedad, se construirán durante esta administración al menos otras 2 líneas más del sistema de transporte conocido como metrobús.

El funcionario estatal quien fue recibido por diputados de la Comisión de Transporte del Congreso local defendió, como parte de los trabajos de la glosa del informe, el sistema de transporte articulado, RUTA.

Huerta Couttolenc manifestó en su comparecencia que durante el año 2012, se desarrollaron diversos proyectos de infraestructura en la capital de Puebla que requirieron de una activa participación e intervención por parte del personal técnico de la Secretaría del Transporte, uno de ellos, fue la implementación del Corredor Chachapa-Tlaxcalancingo de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), que implicó diseñar la trayectoria de 10 rutas alimentadoras, garantizando la cobertura espacial que ofrecían las rutas convencionales antes de integrarse a la empresa operadora de este Primer Corredor, satisfaciendo así las necesidades de traslado de los usuarios conforme su origen-destino en el menor tiempo de viaje posible.