Activistas van con todo contra el teleférico y rueda de la fortuna para evitar de manera legal y permanente que sean instalados y no sólo suspendidas sus inauguraciones, ante la amenaza del gobernador Rafael Moreno Valle de que continuará la obra

Las calificaron como obras fastuosas e inútiles, ya que con los 400 millones que se gastarán para el proyecto del teleférico y la rueda de la fortuna se invertirá más dinero que en algunas dependencias clave para el desarrollo de Puebla, advirtieron activistas, por lo que se deben frenar por completo.

Por ejemplo, tan sólo la Secretaría de Competitividad, Desarrollo y Trabajo Económico (Secotrade) recibirá un presupuesto de 161 millones de pesos y la del Turismo 136 millones de pesos, muy por debajo de los proyectos de Rafael Moreno Valle.

Este lunes el mismo mandatario estatal indicó que no se inaugurará el teleférico para el Tianguis Turístico el 17 de marzo, como lo tenían programado, sin embargo advirtió que la obra seguirá, por lo que los activistas en contra del teleférico señalaron que se debe frenar por completo su construcción, lo que finalmente determinará una juez federal que se encuentra estudiando el caso, y no Moreno Valle.

Altos costos
Edmundo Gutiérrez Domínguez, integrante del Comité Defensor del Patrimonio Histórico y Cultural de Puebla, señaló que el costo del teleférico y rueda de la fortuna no sólo es en el erario, sino en la destrucción patrimonial.

“La destrucción de esta la histórica —en el barrio del Artista— costó más que una secretaría que se supone está para proponer el desarrollo de Puebla, como es la Secotrade, que recibirá este año 161 millones de pesos.

”Se ha dicho que el teleférico va a ser para impulsar el turismo en la ciudad de Puebla; sin embargo, 200 millones de pesos costó derruir el monumento histórico y la Secretaría de Turismo va a recibir un presupuesto anual de 136.1 millones de pesos.

”Para que tengan una idea, como destruyendo un edificio con 200 millones de pesos y van a promover el turismo con la Secretaría encargada del tema que sólo recibe 136 millones de pesos.

”La rueda de la fortuna, la que llamamos la fortuna para pocos y el infortunio para la ciudad costará otros 200 millones de pesos. Es decir, entre la rueda de la fortuna y el teleférico con la destrucción del patrimonio histórico se están yendo 400 millones de pesos.

”La detención de la obra ha servido de manera pedagógica para demostrar que los ciudadanos tenemos derechos y los gobernantes tienen leyes que respetar; creemos que si los ciudadanos se organizan para defender sus derechos estipulados en la ley, se puede lograr”, dijo.

“El haber suspendido la obra es el trabajo de muchos ciudadanos y hacerle mostrar a nuestros gobernantes que tienen que respetar las leyes. Este proceso ante la juez va a proseguir en unas semanas.”

Indicó que la sentencia final determinará si se suspende toda la obra, lo que implicaría derribar todas las torres que ha construido el gobierno de Puebla.

“Deben saber que la ley de monumentos históricos se establece que no se pueden construir estructuras o edificaciones más allá de 65 metros de altura que obstaculicen la visualidad del entorno de la zona histórica.”

Indicó que por lo tanto, las torres tienen una altura mayor, lo que no cumple con el reglamento.

“Tan sólo la torre del barrio del Artista ha destruido la Casa del Torno, un edificio catalogado en el INAH, eso es un delito federal”, indicó el especialista.
 
#Yosoy132
En tanto, el recién creado “Movimiento Independiente No al Teleférico” y #Yosoy132 continúan la lucha, pero sobre todo en redes sociales donde han creado espacios en blogs y Facebook.

Zvezda Ninel Castillo Romero, integrante del #Yosoy132 en Puebla, señaló que el teleférico y rueda de la fortuna son obras fastuosas que se hacen a espaldas de los ciudadanos, quienes viven en medio de carencias.

“En el estado de Puebla existen muchas carencias que son ignoradas por los gobernantes, que a espaldas de la gente y violando varias leyes pretenden invertir en proyectos costosos, mal planeados, innecesarios y que destrozan nuestro patrimonio.

”Esta no es la primera construcción que el gobierno ha puesto en marcha en condiciones de irregularidad, sin contar con los permisos del INAH, marcados como una obligación previa y sin tener un proyecto concreto.

”Y sin estar dispuesto a la revisión de cualquier ciudadano interesado. El centro histórico de Puebla es un patrimonio de la humanidad, un tesoro que les pertenece a la ciudadanía y que es protegido por numerosas leyes que demuestran la importancia de proteger el enorme valor histórico, artístico y cultural

”A pesar de ello el centro está siendo víctima de numerosos proyectos sin sentido pasando por encima de las verdaderas necesidades de los poblanos, se desperdician enormes recursos y que están impactando de forma irreversible el paisaje histórico.

”Hacemos un llamado a la defensa del arte y la memoria histórica, de los derechos ciudadanos y de nuestra dignidad, la que se ofende y responde cuando la autoridad se planta a cometer ilícitos a la luz del día y los disfraza de una benevolente modernidad.

”No estamos de acuerdo con el teleférico por ser un proyecto sin sentido, un proyecto que desperdicia los recursos de los poblanos y sin ninguna coherencia con la identidad de la ciudad.

”Nos quita nuestro derecho a participar, los ciudadanos deben apropiarse de su espacio, las plazas públicas les pertenecen. Es lo que estamos tratando de hacer, que la gente se una y diga lo que piensa de este proyecto.

”Hay muchas carencias y necesidades que tienen mucho más peso que esto y sin embargo el gobierno elige destruir 300 años de historia y cambiar el panorama de la ciudad”, señaló la activista.

“Ya pasó con el viaducto Zaragoza, la restauración de los fuertes, se tiene proyectada una rueda de la fortuna. Todos estos proyectos no pasan por la vista de los ciudadanos y es lo que queremos que cambie”, terminó la también estudiante de la Universidad Autónoma de Puebla.

La rueda, un despilfarro
La rueda de la fortuna comprada por el gobierno de Puebla cuenta con muros y pisos de cristal, asientos de piel, mesas centrales y hasta espacios para colocar bebidas, según el periódico Reforma.

Incluso, la posibilidad de incluir televisiones, como las que construyen las empresas Diseño Bussink y Maurer German Wheels.

Ambas empresas diseñaron una versión que se instala de forma permanente y una que es completamente portátil de 80 metros de altura con una base de 30 por 35 metros de dimensión y su transportación se realiza en 60 contenedores.

Para ambas versiones se ofrecen ruedas con 54 cabinas en las que pueden ingresar ocho pasajeros con diferentes configuraciones de asientos: cara a cara, espalda con espalda, coctel, cena o VIP, según lo especifica el sitio de Diseño Bussink.

En las imágenes de la estructura se puede observar que los compartimentos para los usuarios pueden llevar pisos de cristal, asientos de piel, espacios para colocar bebidas y en algunos casos es posible instalar pantallas planas.

Los materiales para la rueda y los proveedores son de los Países Bajos, Alemania, Suiza, Francia y Liechtenstein.

La empresa señala que el diseño de la estructura tomó más de 30 años de experiencia y cinco años de diseño intensivo y obras de ingeniería por un equipo de profesionales altamente calificados.

El costo no fue revelado por el empleado, quien tan sólo dijo que sería “una cifra de dos números seguida de seis ceros”, en euros.

El proceso
El INAH confirmó mediante oficios que abrió un proceso administrativo para la suspensión de los trabajos de construcción del teleférico de la ciudad de Puebla al no contar con su permiso.

Los documentos en poder de Intolerancia Diario están fechados el 28 de diciembre y firmados el titular de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos, Arturo Balandrano Campos.

En los documentos oficiales bajo el oficio número 401.F(6)138.2012/4202, informó al defensor del Patrimonio Histórico que hasta esa fecha no se había emitido ninguna autorización para la realización de los trabajos del teleférico.

Por lo tanto, la dirección general del INAH —con sede en la ciudad de México— comenzó un proceso administrativo para la suspensión de los trabajos, el cual se encuentra vigente a la fecha.

En el documento, el funcionario federal reconoce que tampoco se dio permiso para la demolición de la llamada Casa del Torno, ubicada en el número 414 de la calle 8 Norte, en la cual estará una de las estaciones del teleférico.

Se informa que proyecto del teleférico fue presentando ante el INAH apenas el 26 de noviembre de 2012, pese a que los trabajos de cimentación empezaron desde finales de octubre.