El presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso del estado, Gerardo García Ramírez, advirtió que el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas está mandando una pésima señal, a un mes de que inicien las campañas electorales, al haber nombrado a Facundo Rosas Rosas como nuevo secretario de Seguridad Pública.
El legislador señaló que el nuevo funcionario estatal cuenta con antecedentes de flagrantes violaciones a los derechos y garantías de los ciudadanos en diferentes partes del país.
Comentó que un tema que se le criticó al presidente Felipe Calderón Hinojosa fue precisamente su estrategia de combate a la delincuencia y resulta que uno de los articuladores de esa mala planeación fue premiado al nombrarlo secretario de Seguridad Pública.
Aclaró que es una decisión exclusiva del Ejecutivo del estado y no se está de acuerdo, pero la ley lo establece y habrá que respetar la decisión que fue tomada.
De las consecuencias que puede tener el nombramiento, insistió en que fue una pésima idea haber nombrado a una persona que tiene las características que han documentado los medios, previo a que inicien las campañas electorales.
Gerardo Mejía manifestó que está el antecedente de que es todo un represor, y hay información de que en repetidas ocasiones no ha pasado los exámenes de confianza y la propia delincuencia organizada lo señala de recibir sobornos, esto en las declaraciones ministeriales que se tienen.
Al indicarle del currículum que se presenta acerca del funcionario, del cual se dice que es impresionante, insistió en que sí es impresionante lo referente a la represión y que no haya pasado los exámenes de confianza.
Negro historial
“El Terminator”, como se le conoce al excomisionado de la Policía Federal, Facundo Rosas Rosas, es el nuevo secretario de Seguridad Pública y llega a Puebla con un “negro historial” y una estela de dudas en su actuar al frente de la PF.
Facundo Rosas dejó el cargo en la Policía Federal a principios de 2012 tras la muerte de tres personas en el desalojo de estudiantes en la Autopista del Sol a Acapulco. También se le vincula con una de las delincuentes que presuntamente participaron en el secuestro de Fernando Martí en 2008, a quien le dio trabajo en la Secretaría de Seguridad Pública federal.
De acuerdo con información del periódico La Jornada, Facundo Rosas incumplió al menos en dos ocasiones, en 2007 y 2009, en la realización de los exámenes de confianza.
Una carta que Edgar Valdez Villarreal, “La Barbie”, envió al periódico Reforma, implica a Facundo Rosas en recibir dinero del narcotráfico desde 2002.
El apunte
Gerardo Mejía advirtió que Puebla se mantiene como un estado seguro y corre el riesgo de perder la estafeta, “y llama la atención que a falta de 90 días para la elección se nombre a un represor como secretario de seguridad, no es posible”, dijo.
