El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, puso como ejemplo de unidad la Batalla de Puebla del 5 de Mayo de 1862 y aprovechó para llamar a las fuerzas políticas a aprobar las reformas estructurales.
Peña Nieto señaló que en esta época surge un México nuevo, capaz de la victoria en el ámbito mundial: “El mundo reconoce que hoy, está surgiendo un México nuevo que deja atrás los obstáculos y que hacen un México optimista de sus oportunidades y determinado a aprovecharlas. Un México con la voluntad y la capacidad de triunfar en el orden internacional”.
Al dirigirse a la clase 1994 de anticipados y remisos, el presidente de la República señaló que con “unidad y compromiso” México saldrá adelante, como lo hizo el Ejército de Oriente hace 151 años:
“Unidad y compromiso permitieron triunfar al Ejército de Oriente aquí, en Puebla.
”Unidad y compromiso son los principios que hoy alientan a las principales fuerzas políticas y al gobierno de la República para seguir adelante con la agenda de reformas transformadoras que el país demanda y necesita. Unidad y compromiso son dos valores que alentaremos en todo momento, para que sociedad y gobierno movamos a México.”
El presidente de México asistió a la toma de protesta de los anticipados y remisos de la Clase 1994 del Servicio Militar Nacional en el mausoleo a Ignacio Zaragoza.
Enrique Peña Nieto colocó una ofrenda floral y montó una guardia de honor en memoria de los soldados caídos en la Batalla del 5 de Mayo.
Posteriormente, Enrique Peña Nieto presenció el desfile desde el palco central.
Lo acompañaron el general secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda; el almirante de la Marina, Francisco Soberón Sanz, y el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle.
También acudieron el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, representantes del Poder Judicial y miembros del gabinete legal y ampliado, y funcionarios del gobierno estatal.
El patriotismo del Ejército de Oriente
Durante la toma de protesta de bandera de los soldados del Servicio Militar Nacional Clase 1994, anticipados y remisos, y mujeres voluntarias, el presidente de la República fue el único orador de la ceremonia.
El presidente de la República hizo un recuento de la Batalla del 5 de Mayo de 1862.
Enrique Peña Nieto resaltó la importancia de la Batalla de Puebla para la historia patriótica del país: “Hoy nos hemos reunido para celebrar uno de los episodios más memorables y valerosos de nuestra historia nacional: la Batalla de Puebla.
”En este mismo lugar, hace 151 años, los mexicanos combatieron con arrojo y patriotismo para defender la independencia y la soberanía nacional.
”El joven general Ignacio Zaragoza, al frente del Ejército de Oriente, enfrentó y derrotó al que en ese momento era considerado el ejército más poderoso del mundo.”
El presidente de la República glorificó la defensa que realizó el Ejército de Oriente desde los Fuertes de Loreto y Guadalupe: “El motivo de aquel enfrentamiento fue que el emperador de Francia, Napoleón III, pretendía establecer una monarquía europea en nuestro país, y para conseguirlo había enviado a lo más destacado de sus fuerzas.
Los franceses, que tenían superioridad numérica, soslayaron la determinación, el valor y el coraje de los mexicanos, y decidieron atacar los Fuertes de Loreto y Guadalupe. En la mañana del 5 de mayo de 1862 comenzó el duelo de artillería entre las tropas francesas y mexicanas. Después, las fuerzas invasoras enviaron a su experimentada infantería para tomar Los Fuertes.
De la resistencia del Ejército de Oriente, Peña Nieto extrajo la moraleja de la unidad nacional como requisito para vencer los obstáculos:
“La resistencia de México fue inquebrantable, especialmente la de los zacapoaxtlas de la Sierra del Norte de Puebla, quienes combatieron cuerpo a cuerpo hasta obligar al enemigo a retroceder. Los franceses pensaban que su ejército era invencible. El mundo así lo creía.
Sin embargo, los mexicanos demostraron en aquella histórica batalla lo que podemos lograr como país cuando estamos dispuestos a anteponer el bien superior de la nación a cualquier otro interés. Pudieron más la unidad y el patriotismo de los mexicanos que la ambición de un imperio.”
El presidente de la República ensalzó la lucha de los combatientes mexicanos en contra del poderoso Ejército francés:
“En el general Zaragoza y en los héroes de Puebla, los mexicanos tenemos un ejemplo permanente y una gran inspiración para afrontar los retos de nuestro tiempo.
”A la distancia de estos gloriosos acontecimientos, los mexicanos de hoy nos hemos propuesto alcanzar un México en paz, en el que las familias gocen de tranquilidad y prevalezca la justicia.”
De la heroicidad de los defensores de Puebla de 1862, Enrique Peña Nieto se dirigió a los desafíos del México actual:
“Nos hemos planteado construir un México incluyente, en el que nadie sufra por hambre, en el que todos gocen de un piso básico de bienestar.
”Estamos decididos a impulsar un México con educación de calidad para todos, en el que nuestros niños y jóvenes cuenten con la formación necesaria para escribir su propia historia de éxito.
”Al mismo tiempo, hemos resuelto hacer de nuestro país un actor con responsabilidad global, que contribuye solidariamente a resolver los principales desafíos que tiene la humanidad.”
El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, reconoció el nuevo papel que juega México en el mundo: “El mundo reconoce que hoy, está surgiendo un México nuevo que deja atrás los obstáculos y que hacen un México optimista de sus oportunidades y determinado a aprovecharlas. Un México con la voluntad y la capacidad de triunfar en el orden internacional”.
Finalmente, Enrique Peña Nieto ligó la historia patriótica con los desafíos del futuro: “Hoy, se está construyendo el México del siglo XXI el que enfrenta con decisión sus problemas. Un México que poco a poco se libera de las ataduras que hasta ahora le han impedido crecer a su verdadero potencial.
”En este México de hoy, dejemos que nuestra historia nos inspire y nos motive para asumir la responsabilidad que a todos nos corresponde.”
El patriotismo, según Peña
Al dirigirse a los jóvenes anticipados y remisos del Servicio Militar Clase 1994, el presidente de la República los exhortó a ser patriotas: “El Servicio Militar Nacional fortalece nuestra identidad como mexicanos, fomenta los valores en nuestra juventud e inculca el amor a la Patria.
”Recuerden que su juramento es un compromiso permanente con México. En pocas palabras, es un deber para toda la vida.
”Se es patriota, cuando los jóvenes se comprometen con las mejores causas de México. Se es patriota, cuando actuamos apegados a la ley. Se es patriota, cuando formamos a nuestros hijos con valores, para que sean mujeres y hombres de bien. Se es patriota, cuando se imprime el mayor esfuerzo a cada labor que llevamos a cabo.
”Sean patriotas. Enaltezcan los más elevados propósitos de México en todo lo que emprendan: en sus estudios, en su trabajo diario, en su tiempo libre. En todo lo que realicen, lleven nuestra bandera en el corazón. Hónrenla y defiéndanla con toda su fuerza, con todas sus capacidades. En su compromiso por construir un México mejor, ustedes mantienen vivo el espíritu de lucha de los héroes del 5 de Mayo.”