Las dimensiones de pobreza se reflejaron principalmente en la carencia de servicios de acceso a la seguridad social, la percepción de un ingreso inferior a la línea de bienestar, es decir, menor al costo de la canasta alimentaria básica, y por carencia de acceso a los servicios de salud.


El diputado priista Gerardo Mejía Ramírez lamentó que el gobierno del estado se niegue a aceptar que sus planes de desarrollo social fracasaron o que nunca los aplicó, como se había ofrecido al inicio de la administración, e indicó que, a pesar de que defensores, no puede ocultar que 64 por ciento de la población en el estado es pobre.

Mejía Ramírez lamentó que en la última sesión del segundo período ordinario de sesiones se haya “mayoriteado” por parte de las bancadas del PAN y Nueva Alianza para frenar un exhorto que presentó el diputado Edgar Salomón Escorza a fin de que el gobierno del estado redefina su política de desarrollo social.

Recordó que únicamente hubo ataques en contra de su compañero, pese a que el documento que presentó tenía el sustento donde se indica el fracaso del gobierno del estado para combatir la pobreza, e indicó que él seguirá respaldándolo, ya que no se puede “tapar” la pobreza con ruedas de observación.

Indicó que el documento respaldado por la bancada y que se presentó al pleno, como se había anunciado el día en que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social dio a conocer los resultados de los últimos dos años, indica que el estado de Puebla cuenta con una superficie territorial de 34 mil 251 kilómetros cuadrados, con una población de 5 millones 779 mil 829 personas, lo que lo convierte en el quinto estado más poblado del país.

Dijo que, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, que recientemente informó los resultados de la medición de pobreza al año 2012 a nivel nacional, las dimensiones de pobreza se reflejaron principalmente en la carencia de servicios de acceso a la seguridad social, la percepción de un ingreso inferior a la línea de bienestar, es decir, menor al costo de la canasta alimentaria básica, y por carencia de acceso a los servicios de salud.

El documento oficial precisa que, de acuerdo con datos de la encuesta para medir el porcentaje de población en situación de pobreza por entidad federativa, Puebla se ubica como el tercer estado más pobre de la Republica mexicana, sólo por debajo de Chiapas y Guerrero. Según la propia encuesta, nuestra entidad paso de contar con 3 millones 616 mil 300 pobres en 2010, el 61.5% de la población, a 3 millones 878 mil 100 pobres en 2012, traducidos en el 64.5% de la población del estado. Es decir, lejos de disminuir los índices de pobreza en la entidad, tenemos que, a partir de la administración en turno, pasaron a situación de pobreza 261 mil 800 personas más.

Gerardo Mejía lamentó que los demás diputados busquen justificar o negar lo que es una realidad, ya que en lo que se refiere al rubro de pobreza extrema padecida por quienes tienen tres o más carencias sociales y perciben un ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo, Puebla se ubica en el cuarto sitio a nivel nacional, sólo por debajo de Chiapas, Guerrero y Oaxaca, con un millón 59 mil 100 poblanos en esa condición, lo que representa el 17.6 % de la población total del estado.

El diputado indicó: “Dentro de las principales causas generadoras de pobreza y pobreza extrema en nuestra entidad según el Coneval, encontramos las carencias sociales, es decir, la ausencia de servicios públicos suficientes y de calidad, la carencia de acceso a la seguridad social, la vulnerabilidad generada por ingresos escasos y limitados y la carencia por servicios básicos en la vivienda, por mencionar los de mayor repercusión”.

Dijo que el miércoles 31 hubo frases que le incomodaron a los diputados, e indicó: “La administración local en turno ha dejado muy en claro desde el principio de su gestión la importancia que tienen los pobres dentro de su gobierno. La atención a este sector ha sido nula, por el contrario, se ha apostado por la construcción de grandes obras sin el más mínimo sentido social. Es lamentable e incongruente que de un presupuesto mayor a los 58 mil 500 millones de pesos, con el que cuenta el estado para el ejercicio fiscal en turno, únicamente se hayan destinado 549 millones de pesos al rubro de desarrollo social, cuando en contraste se género una deuda indirecta, comprometiéndose recursos por más de 3 mil millones de pesos para la construcción del Centro Integral de Servicios; aproximadamente 400 millones de pesos para la compra e instalación de la Rueda de Observación ubicada en la zona de Angelópolis; además de los costos generados y el compromiso de recursos públicos por varios años, derivados de la construcción del teleférico y del polémico proyecto del metrobus”.

”La actual administración estatal ha sido polémica desde el inicio de su mandato debido al excesivo gasto en difusión y medios de comunicación; celebraciones ostentosas y de proyección internacional, con la única intención de enaltecer a una persona y no a un acontecimiento histórico del que todos los mexicanos nos sentimos orgullosos, como lo es la Batalla del 5 de Mayo. Bajo la justificación del fortalecimiento del sector turístico, observamos que es más alta la inversión que el ingreso obtenido por la realización de proyectos, eventos y celebraciones. Lamentablemente, un proyecto transexenal ha ocupado más la atención de nuestros gobernantes que el interés por generar más y mejores condiciones de vida para todos los poblanos.”

Reiteró: “Los resultados saltan a la vista y son consecuencia del desinterés por atender a los sectores más desprotegidos de la sociedad, no lo dice una persona o un partido, sino un referente acreditado a nivel nacional como lo es el Coneval. La percepción social en Puebla es de pobreza e inseguridad, y cómo no habría de ser así cuando observamos que la Secretaría de Desarrollo Social, motor de desarrollo e igualdad de oportunidades, por lo menos en el papel, ha sido utilizada como trampolín político, lo cual nadie podría negar, ya que tres de sus extitulares actualmente ostentan un cargo de representación popular, sea una regiduría, diputación federal o local (Myriam Arabian Couttolenc, Nestor Gordillo Castillo y Salvador Escobedo Zoletto), e incluso su actual titular, Mario Rincón, es diputado electo por el recién creado distrito de Amozoc”.

Finalmente, expresó que se solicitará a la Cámara de Diputados a nivel federal que analice los proyectos que serán aprobados para Puebla este año: “Existen instancias de carácter federal que participan en este ejercicio de asignación y fiscalización, como lo es la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, que cuenta con la facultad de aprobar anualmente el presupuesto de egresos de la federación, el cual incluye las partidas correspondientes a cada entidad federativa y que para el caso de Puebla durante el ejercicio en curso ascendió a cerca del 90 por ciento de los recursos que integraron el presupuesto de egresos del estado.