Desde el CIS de Angelópolis, la zona privilegiada de Puebla, el Consejo Nacional de la Cruzada contra el Hambre en Puebla se comprometió a luchar en contra de este flagelo.
Frente al centro comercial Angelópolis y teniendo como fondo la Estrella de Puebla, un helicóptero aterrizó en el edificio construido a través del mecanismo de Proyecto de Prestación de Servicios.
En el salón Gobernadores del CIS esperaban los integrantes del Consejo Nacional de la cruzada en Puebla al gobernador Rafael Moreno Valle y a la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga.
En el salón Gobernadores los funcionarios del gobierno estatal se le cuadraban al arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, a quien se le tomó protesta, entre otros integrantes, como miembro del Consejo Nacional de la Cruzada contra el Hambre.
Al líder religioso lo reverenciaron.
Al llegar el funcionario estatal Rodrigo Riestra al salón Gobernadores, lo primero que hizo fue dirigirse al arzobispo de Puebla; otro de los que le fueron a hacer caravanas al líder religioso fue el líder maicero Efraín García Bello.
La secretaria de Desarrollo Social fue políticamente correcta.
Impecable en su trato con el gobernador poblano, no escatimó elogios. El político poblano le correspondió con la misma moneda de la melcocha política.
Rosario Robles le tomó protesta al consejo.
Desganados, los empresarios y demás integrantes del consejo, respondieron a la toma de protesta.
Robles los arengó:
—¡Fuerte!
Los integrantes del consejo juraron con un poco más de fuerza.
La funcionaria federal leyó un mensaje donde abordó las fallas de programas como Oportunidades y los yerros de pensar que la pobreza solamente es un asunto de contención y no de transformación.
A diferencia del mensaje del gobernador Rafael Moreno Valle, quien planteó que para acabar con la pobreza hay que crear riqueza, Robles Berlanga añadió: “Riqueza bien distribuida”.
El matiz, casi imperceptible, marcó la visita de la funcionaria federal a territorio poblano. La primera visita para promover la Cruzada contra el Hambre, tan sólo a unos cuantos días de que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, rinda su primer informe presidencial en un álgido clima político y con señales de contracción económica.
En su mensaje, el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, señaló: “Celebro la instalación de este consejo, me parece muy noble. Estamos pensando en aquellos hombres y mujeres que han perdido la esperanza. Pero sí es posible construir un mejor futuro y salir adelante en la vida, y que juntos podamos construir una Puebla más justa equitativa y con oportunidades para todos”.
La secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, señaló que no es otorgando despensas como se resuelve el problema del hambre, sino creando opciones productivas.
Robles realizó la crítica del modelo asistencialista. “Vamos a ir a sembrar huertos en 14 municipios del estado”, afirmó la funcionaria federal.
La secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, señaló que la instalación del consejo servirá para vigilar que los recursos que se estén invirtiendo sean aplicados de manera transparente y de manera clara.
La funcionaria federal afirmó que el propósito de la cruzada es mover los indicadores: “Queremos mover el indicador de carencia alimentaria, queremos mejorar la nutrición de nuestros niños y niñas porque si no un niño está condenado a la desigualdad de por vida, si ese niño o niña no está alimentado adecuadamente. Queremos mejorar el indicador de rezago educativo, nuestro indicador de vivienda. Estamos realizando la cruzada desde abajo. Queremos mejorar todos estos indicadores. Las acciones se están alineando en función de estos indicadores, queremos que ustedes nos aporten sus ideas, su visión”.
Rosario Robles repudió que en los municipios más pobres del país se realicen actos de corrupción que afectan a las personas que viven en condiciones de pobreza.
“Es verdaderamente triste y nos ha tocado visitar municipios donde la asamblea define sus prioridades. Esa obra se hizo en algún momento, es que la obra está y se pagó y se hizo. No es posible que los recursos que están destinados a las comunidades más pobres del país no se ejerzan con transparencia.
”Es una infamia porque es gente que no tiene nada para comer”, sentenció la funcionaria federal.
“Nos obliga a actuar como caja de cristal, no estamos esperando complacencias ni aplausos.”
La funcionaria planteó trabajar en la lógica de la inclusión productiva.
Robles Berlanga explicó las limitaciones del programa Oportunidades señalando que a pesar de que ha sido un programa de asistencia social muy importante no ha logrado revertir las tendencias de la pobreza en nuestro país:
“Pero si analizamos la última evaluación del Coneval, 52 millones de mexicanos viven en pobreza, la curva y la tendencia no ha cambiado, casi la mitad de los mexicanos sigue estando en condición de pobreza a pesar de la transferencia de recursos.”
La secretaria del ramo explicó que eso demuestra que se requiere una puerta de salida para incorporar a las personas que ocupan Oportunidades al desarrollo productivo, para que no sean toda la vida beneficiarios de oportunidades.
“Nos ha faltado la puerta de salida. ¿Cómo logramos que la gente salga de oportunidades, sino que la gente encuentra la posibilidad de encontrar la oportunidad de salir por sí mismos? Les tenemos que encontrar una salida en el mercado laboral o una mayor escolaridad para que puedan romper el círculo de la pobreza”.
La funcionaria federal afirmó que a la pobreza no hay que contenerla, sino transformar verdaderamente las condiciones de vida de los ciudadanos que viven en situación de pobreza.
“Hay que vincular la democratización de la productividad porque lo otro es contener, realmente hay que transformar la condición, es a partir de que la gente pueda generar su propio ingreso, su propia puerta de salida.”
Robles Berlanga puso como ejemplo a los migrantes poblanos que se van a vivir a Nueva York: “¿Por qué los poblanos de la Mixteca en Nueva York son exitosos? Me reuní con ellos. Son poderosísimos, súper exitosos. Pero aquí en su tierra no eran nadie. Es la gente más emprendedora, la gente sabe trabajar, nuestra gente sabe salir adelante; lo que necesitamos generar son condiciones para que la gente salga adelante no allá sino aquí”.
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En Azumiatla, los funcionarios también llegaron en helicóptero.
Se lanzaron débiles porras para el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, y para la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga.
Los habitantes de Azumiatla observaron el descenso de dos helicópteros. La secretaria de Desarrollo Social y el gobernador abordaron sus camionetas.
Policías estatales, soldados del Ejército y hasta policías federales formaron un convoy para resguardar los dos vehículos de los funcionarios. Los funcionarios evitaron caminar un tramo de unos 800 metros y llegaron escoltados al CIS de Azumiatla.
El inmueble lucía radiante. Los trabajadores habían realizado los últimos retoques al edificio y aunque no habían terminado les habían ordenado que se retiraran en tanto se realizaba el acto oficial.
En las primeras sillas se colocó a funcionarios estatales, atrás de ellos a los brigadistas de la campaña contra el hambre, uniformados con playeras y gorras que hacían alusión a la campaña.
Un payasito animaba a los invitados pidiendo porras para el gobernador.
“Estamos en esta labor de causa común para que entre todos, porque así lo ha dicho el presidente Peña, gobierno estatal, y los jóvenes que mueven a México”, señaló Robles.