El economista Alejandro Chávez Palma señala que es una mala justificación el achacarle a la “dispersión poblacional” el aumento de la pobreza en el estado de Puebla, tal y como las autoridades estatales lo han hecho.
Para Chávez Palma, justificar los recientes resultados del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) atribuyéndolos a la “dispersión poblacional” sin ubicar que se trata de una “pésima administración de los recursos fiscales, tanto a nivel federal como estatal” es perder de vista que el gasto se ha dirigido a obras suntuarias y a limitarse a aplicar los programas federales sociales sin hacer un esfuerzo mayor.
El economista, de manera figurada, señaló que se trata de “una maquinaria de empobrecimiento generalizado”, que de 2010 a 2012 ya mostró cuál será la tendencia del crecimiento de la pobreza en la administración estatal.
La administración estatal se conforma con aplicar los programas federales, mientras emplea los fondos para otras áreas, como la construcción de obras públicas de relumbrón en la ciudad capital. “Dichas obras lucen e impactan mucho, pero en nada contribuyen al desarrollo social”, opina el economista.
Chávez Palma, doctor en Economía por la Universidad Autónoma de Puebla, mencionó que en las mediciones del Coneval paradójicamente, mientras la administración estatal es calificada positivamente por las certificaciones internacionales y por las auditorias “a modo” del órgano de fiscalización estatal, Puebla ingresó por primera vez en 20 años entre las tres peores entidades del país en este indicador, a pesar de su disciplina presupuestal y fiscal.
El economista señaló que las obras que se realizan en Puebla son solamente de “relumbrón” y no han impactado en la disminución del número de pobres en el estado.
Chávez Palma cuestionó que en todo el país se han gastado 565 mil millones entre los años 2000 a 2012 en el programa Oportunidades sin que disminuya el número de pobres en el país ni en el estado: “No es poco, seguramente no es suficiente, pero no es poco”.
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Alejandro Chávez Palma afirmó que una de las acciones inmediatas que se deben realizar para frenar el crecimiento de la pobreza es revisar a fondo cómo se han invertido los recursos de los programas sociales y de combate a la pobreza y a la marginación en el estado porque, debido a las políticas públicas estatales implementadas en los últimos dos años, Puebla se ha convertido en una fábrica de pobres.
“Una parte de las reformas necesarias consiste en revisar como y en qué se han gastado esos cientos y miles de millones de pesos destinados a combatir la pobreza, porque esta tarea hay que hacerla pensando en las personas, en los habitantes, en la gente, en la población sus derechos humanos y no desde el escritorio y después de unas placenteras vacaciones tergiversar la realidad de su dispersión en asentamientos que la fallida planeación ha provocado en los últimos 30 años. Esto ha dado como resultado la existencia de una verdadera fábrica de pobres a nivel nacional y sobre todo en el estado de Puebla en los últimos tres años al pasar Puebla al tercer lugar de pobreza a nivel nacional a pesar de las obras suntuarias desligadas del progreso social.”
En el caso de Puebla, recordó Chávez Palma, en el año 2010 había un millón 589 mil personas viviendo en el nivel de pobreza extrema, de acuerdo con los datos de Coneval; para 2012 había un millón 830 mil personas viviendo en pobreza extrema, es decir, hubo un incremento de 241 mil personas que viven en pobreza extrema.
