Un grupo de trabajadores despedidos la semana pasada, de la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT), denunciaron una nueva “ola” de destituciones al interior de la dependencia, que se traduce en 5 por ciento de recortes de personal, además de la falta de pago de muchos empleados y el maltrato laboral permanente: “El miércoles pasado fue el cierre anual de finanzas para hacer movimientos para la contratación o despido de personal, y de la secretaría salimos poco más de 5 por ciento de una plantilla cercana a los 600 trabajadores”.
Los cambios, dijeron los extrabajadores de la dependencia, fueron impulsados por el director administrativo, Miguel Efrén Cervantes Pérez, protegido del secretario de Finanzas y Administración, Roberto Moya Clemente, quien “se siente protegido y eso lo lleva a actuar con mayor poder que el propio secretario, porque a Julio Lorenzini le dijeron que todas las plazas habían sido desaparecidas del presupuesto de 2014, cuando todos sabemos que se contrató personal incondicional del propio Cervantes Pérez”.
Ante eso, los trabajadores despedidos revelaron que en las últimas semanas la sorpresa al interior de la SDRSOT fue la salida abrupta y sospechosa del jefe de Recursos Humanos, Sergio Durán Ramírez, y de su “mano derecha”, Elizabeth González Reséndiz, quienes —se sospecha— se fueron por malos manejos dentro del área. “Cargo que ahora queda en manos de Herlinda Velázquez Jiménez, que, de recibir un salario de 12 mil pesos mensuales, ahora percibe recursos por arriba de los 20 mil pesos, porque pasa de analista consultiva B a la jefatura”.
Velázquez Jiménez logró el puesto porque es también una de las protegidas de Cervantes Pérez, pero no solamente eso: “Si no que abusa de su relación con el director administrativo y maltrata a los trabajadores, gira más órdenes que el propio director, por lo que nos tiene cansados e intimidados con su prepotencia”.
Los empleados despedidos solicitaron la gracia del anonimato por temor a que los procesos laborales que emprenderán esta misma semana sean frenados por las autoridades gubernamentales poblanas. “El problema es que no nos dieron un sólo peso de liquidación, solamente nos corrieron, pero también permanentemente fuimos objeto de acoso laboral, de prepotencia y de actitudes groseras de los directivos, que responden a los intereses del subsecretario Rodrigo Riestra Piña, quien toma las decisiones en la secretaría”.
Otra anomalía que encontraron los empleados despedidos de la SDRSOT es que la semana pasada empezaron a solicitar las renuncias de la mayoría del personal adscrito a las diferentes áreas de la dependencia, pero solamente consideraron a los trabajadores contratados por el secretario Lorenzini Rangel y no “tocaron” a la gente de Rodrigo Riestra, subsecretario de Desarrollo Rural.