Este 1 de mayo, Día del Trabajo, organizaciones antimorenovallistas piensan abarrotar las calles en protesta contra el gobierno de Puebla, al que acusan de actos de represión y autoritarismo a lo largo de tres años.

Las 25 organizaciones no gubernamentales piensan reunir a más de 30 mil personas para que marchen en protesta por las principales calles de la ciudad de Puebla, entre las que destacan sindicatos, campesinos y grupos de activistas sociales.

Una de las quejas principales será por la embestida paulatina que viene realizando en contra de los sindicatos independientes, afirmó Marco Mazatle, integrante del Movimiento por la Alternativa Social (MAS).

“Esta marcha va a ser una manifestación inédita este 1 de mayo, ya que va a salir un solo contingente, cuando en años anteriores por lo regular salían dos o tres contingentes; va a salir Movimiento Social, sindicatos y diferentes corrientes sociales”.

Señaló que esto se debe a toda la represión que ha ejercido el gobierno estatal hacia los poblanos. “Hoy se está haciendo un frente para decir ¡ya basta!

”Vamos a alzar todos la vos en conjunto. Salimos desde las ocho y media de la mañana de la 25 Sur y avenida Juárez, donde haremos un breve mitin e iniciamos la marcha con rumbo al zócalo”, dijo.

Indicó que marcharán distintos sindicatos integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), así como adheridos al Hospital del Niño Poblano (HNP), además de gente de la organización de Pueblos en Defensa de la Tierra.

Señaló que no habrá contingentes de los sindicatos del ISSSTEP o burócratas, a pesar de que fueron despedidos quienes se interesaban liderarlos. “Ellos están muy presionados, los tienen reprimidos; con este actuar del gobierno del estado, lo que se hace es censurarlos”.

Sin embargo, confió en que en la parte del movimiento social se van a incorporar muchos trabajadores y hasta despedidos del gobierno estatal. “Quizás no con su logotipo, pero si como trabajadores.

”Muchas de las veces pareciera que el primero de mayo es un desfile más y no es así, este primero de mayo invitaremos a la clase trabajadora, campesinos, activistas, ya que como están actuando en contra del Hospital para el Niño Poblano lo harán con el resto de los sindicatos que no son afines al gobierno morenovallista”, destacó.

—¿Irán sindicatos de trabajadores del gobierno?

—Claro, marchan del Hospital del Niño Poblano…

—¿El SUTISSSTEP, o burócratas?

—Mira, ellos están presionados, los tienen reprimidos con este actuar del gobierno del estado, que lo que hace es censurarlos. Yo creo que en la parte del movimiento social se van a incorporar muchos trabajadores, quizás sin logotipo.

Marco Mazatle, también líder del Sindicato de Telefonistas, integrante de la Unión Nacional de Trabajadores, anticipó que en breve en el SUTISSSTEP y en la Sección 25 del Sindicato de la Secretaría de Salud habrá también elecciones “a modo”.

En el primer caso, dijo, ya corrieron los dirigentes de las diferentes corrientes, mientras en el segundo se supo es que los trabajadores exigían la convocatoria para el cambio de dirigente —Julio Alfredo García— por no defender sus derechos.

“El gobierno del estado se está metiendo en la vida interna de todos los sindicatos y eso es muy peligroso para todos”, concluyó.

El investigador y docente de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), Paulino Arellanes Jiménez, señaló que la tendencia del gobierno es seguir “metiendo las manos” en la autonomía sindical.

Por lo que indicó que viola toda la autonomía de los sindicatos, poniendo a las personas o induciendo a que las personas que se queden al frente de éstos, con la finalidad de controlar desde el gobierno cualquier movimiento o inconformidad.

“Además, por otra parte, está metiendo las manos en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje y otras instancias federales para que de esa manera los amparos, las demandas laborales, no procedan y no prosperen y lleven un buen tiempo”, aseguró.

“La manipulación del Congreso del estado, meter la mano en la autonomía de los sindicatos, violar los derechos laborales, esos son elementos fascistas, no solo de autoritarismo”, consideró el investigador.

Por su parte, el coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores en el estado de Puebla, Luis Escobar Ramos, en Puebla habrá un 1 de mayo triste, pues los trabajadores tienen poco que celebrar, por lo que será más que nada una manifestación.

“Los trabajadores cada vez somos tomados en cuenta menos, sólo se les utiliza cuando es período electoral, todo el mundo, todos los candidatos quieren el apoyo de los trabajadores para después darles una patada y los trabajadores somos quienes generamos la riqueza”, enfatizó.

Confió en que este 1 de mayo sea una fecha de manifestación, y si el año pasado participaron cerca de 15 mil trabajadores en este año serán más.

”Hay que destacar que varios compañeros han sido intimidados y esto conlleva a que no muestren su solidaridad”, resaltó.

Tanto los integrantes del movimiento como de la UNT hicieron un llamado a los trabajadores, pero también la ciudadanía, para mostrar su rechazo al autoritarismo del gobierno estatal.

Los que han confirmado desfilar son el Frente Amplio Social compuesto por sindicatos independientes, la Unión Nacional de Trabajadores, el Movimiento Social en Defensa de la Tierra, el Agua y el Territorio y comerciantes de la 28 de Octubre.

Exigirán respeto a las condiciones laborales de los trabajadores y se pedirá la cancelación del Proyecto Morelos, que contempla la construcción de un gasoducto en los estados de Puebla, Tlaxcala y Morelos.

Además, aprovecharan los manifestantes para expresar su apoyo a los activistas Enedina Rosas Vélez, Juan Carlos Flores Solís y Abraham Cordero, quienes fueron detenidos por oponerse al proyecto del gasoducto en la zona del volcán.

“En Puebla no podemos permitir esta situación de terrorismo de Estado, que busca desmantelar la lucha social, que busca las voces que se alzan contra el gobierno o contra los proyectos de muerte.

”Los ejes que tocaremos durante la movilización son: la criminalización de la lucha social, la salud y la persecución sindical, las reformas estructurales, los movimientos sociales y la defensa de la tierra y el agua”, señaló.

Ricardo Jiménez Ávila, integrante del Movimiento de la Alternativa Social, aseguró que se está violando la vida laboral de los trabajadores del estado y municipios.

“Hay que decirlo así y lo que quiere hacer el gobierno estatal es desaparecer sindicatos y hacer sindicatos a modo de sus intereses, recordemos lo que pasó con el Colegio de Bachilleres, que fue el parteaguas de esto”, destacó en entrevista con medios locales.

Opresión sindical
El 13 de julio de 2011, en medio de protestas, procesos jurídicos, acusaciones de ilegalidad e incertidumbre de estudiantes, el Colegio de Bachilleres de Puebla (Cobaep) y el Sitracobp firmaron el contrato colectivo de trabajo.

Al mismo tiempo le fue negado al Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres de Puebla (Sutcobp), lo que cavó su tumba
Ahora, a cerca de tres años de distancia, su líder —Refugio Rivas— asegura que fue víctima de revanchismo por las elecciones de 2010.

Recordó aquel 13 de abril de 2011, cuando el gobierno morenovallista los desconoció como agrupación y fueron sustituidos por lo que llamó un “sindicato charro” o “a modo”: el Sindicato de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (Sitracobp).

El 7 de abril de 2014, tres enfermeras se “crucificaron” y “desangraron” fuera del Congreso del estado, como un acto desesperado luego de la desaparición del Sindicato Único de Trabajadores del Hospital del Niño Poblano (SUTHNP).

Apenas unos días antes la Secretaría de Salud reconoció que habían sido despedidos trabajadores, pero solo seis personas, aunque no detalló que se trató de las dirigentes del organismo sindical.

Fue el 14 de marzo de 2014 cuando el Congreso del estado aprobó un decreto con el cual se suprimió el organismo público descentralizado denominado Hospital para el Niño Poblano y así formar parte de los Servicios de Salud del Estado de Puebla (SSEP).

Según cifras del sindicato, ese mismo lunes se despidió a por lo menos 30 trabajadores agremiados al SUTHNP, entre ellos a los 14 integrantes del comité ejecutivo general.

La secretaria general, Mónica Valencia Serrano, aseguró que la propuesta de ley fue del gobernador: “Ésta, de alguna forma comenzó a aniquilar los derechos y conquistas laborales de los trabajadores del SUTHNP”, resaltó.

“La idea de Moreno Valle es extinguir a todos los sindicatos, no quiere que los trabajadores estén organizados e informados, que sepamos a qué tenemos derecho como trabajadores”.

El 24 de octubre de 2013, 25 empleados sindicalizados de distintas dependencias del gobierno del estado fueron despedidos: los aspirantes a la secretaría general del Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado (STSPE).

Entre los despedidos no solo se encuentran los cuatro aspirantes opositores del entonces secretario general Héctor Posadas Manzano: Martha Rodríguez Salinas, Laureano Galindo, Miguel Ángel Carreón y Hugo Valencia, sino además de Rufino Rodríguez Soledad, secretario de Trabajo y Conflictos del sindicato.

Desde aquella mañana empezaron a entregarse las notificaciones en las distintas oficinas, en gran parte en la Secretaría de Transportes, donde los empleados acudieron con Juan Alvarado, de Recursos Humanos.

Se sabe que entre los despedidos se encuentra gente de entre 25 años y una persona de hasta 42 años trabajando, supuestamente dados de baja para ahorros administrativos.

Martha Rodríguez Salinas, una de las aspirantes a secretaria general y ahora despedidas, les indicó que habría una organización de los burócratas para presionar y que regresaran a sus empleos, además de que pudieran contender por la dirigencia.

El 15 de marzo de 2014, la “ola” de despidos llegó al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado de Puebla (ISSSTEP), en contra de aspirantes a la dirigencia sindical.

Por segunda ocasión se despidieron a aspirantes a dirigir un sindicato de trabajadores estatales, ahora contra quienes pretendían representar al Sindicato Único de Trabajadores del ISSSTEP (SUTISSSTEP).

Esto desencadenó una sola protesta frente al hospital de especialidades de la institución, donde al menos 100 empleados con pancartas exigieron la restitución de los despedidos.

Un día antes de las bajas, fue publicada la convocatoria para la renovación de la dirigencia sindical, para lo cual extraoficialmente se habían conformado cuatro planillas, pero los lideres de tres de ellas fueron notificados que estaban dados de baja el mismo día.

La doctora María Mercedes Bautista iba a cumplir pronto 30 años trabajando en el ISSSTEP, pero este miércoles fue avisada que estaba dada de baja sin mayor explicación y también sin promesas de finiquitos conforme a la ley.