El representante de Izquierda Democrática Nacional y exregidor por la capital, David Méndez Márquez, anunció que habrá movilizaciones en contra de los abusos que ha cometido el Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla en contra de los usuarios de las colonias populares; asimismo, los abusos que se cometen violan acuerdos internacionales.
Luego de la información dada a conocer por los abusos cometidos por la empresa concesionaria del servicio, que muestra un recibo por 175 mil pesos, David Méndez Márquez indicó que en general la afectación es para todos los ciudadanos y subrayó que comenzaron a llegar desde el pasado mes, cuando Aguas de México se hizo cargo del sistema. Los incrementos son del 200 al 300 por ciento para las colonias populares.
Méndez Márquez informó que sostuvo reuniones con colonos de diferentes puntos de la ciudad y la posición de los vecinos es que se movilizarán para denunciar las acciones arbitrarias de un organismo privado en contra de los ciudadanos. Indicó que hay violaciones al artículo cuarto constitucional que indica que el agua es un derecho de los mexicanos.
Viola acuerdo internacional
Los abusos cometidos por Aguas de México y avalados por el Congreso del estado violan incluso acuerdos internacionales tal y como se dio a conocer este año en el marco de la presentación del Plan por la Unidad Nacional y la Defensa de la Soberanía en Puebla, donde participan organizaciones de izquierda y donde Gerardo Pérez Muñoz advirtió que a nivel local la política privatizadora, especialmente la del servicio de agua potable, incurre en una violación a los acuerdos internacionales, especialmente a una resolución emitida por la ONU, en la que sugiere que el costo del agua no debería superar 3 por ciento de los ingresos del hogar.
Pérez Muñoz se refirió a la concesión del SOAPAP y otros organismos de agua potable a empresas privadas.
Advirtió que la acción puede ser violatoria de un acuerdo internacional firmado por México, ya que implica violaciones a los derechos humanos.
Explicó que el 28 de julio de 2010, a través de la resolución 64/292, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció explícitamente el derecho humano al agua y al saneamiento, reafirmando que un agua potable limpia y el saneamiento son esenciales para la realización de todos los derechos humanos.
Dijo que la resolución exhorta a los estados y organizaciones internacionales a proporcionar recursos financieros, a propiciar la capacitación y la transferencia de tecnología para ayudar a los países, en particular a los países en vías de desarrollo, a proporcionar un suministro de agua potable y saneamiento saludable, limpio, accesible y asequible para todos.
Asimismo, en noviembre de 2002 el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales adoptó la observación general 15, sobre el derecho al agua. El artículo I.1 establece que: “El derecho humano al agua es indispensable para una vida humana digna”. La observación 15 también define el derecho al agua como el derecho de cada uno a disponer de agua suficiente, saludable, aceptable, físicamente accesible y asequible para su uso personal y doméstico.
Señaló que el documento explica cada uno de los puntos en cuestión: “Suficiente. El abastecimiento de agua por persona debe ser suficiente y continuo para el uso personal y doméstico. Estos usos incluyen de forma general el agua de beber, el saneamiento personal, el agua para realizar la colada, la preparación de alimentos, la limpieza del hogar y la higiene personal”. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), son necesarios entre 50 y 100 litros de agua por persona al día para garantizar que se cubren las necesidades más básicas y surgen pocas preocupaciones en materia de salud.
”Saludable. El agua necesaria, tanto para el uso personal como doméstico, debe ser saludable; es decir, libre de microorganismos, sustancias químicas y peligros radiológicos que constituyan una amenaza para la salud humana. Las medidas de seguridad del agua potable vienen normalmente definidas por estándares nacionales y/o locales de calidad del agua de boca”. Las guías para la calidad del agua potable de la Organización Mundial de la Salud (OMS) proporcionan la bases para el desarrollo de estándares nacionales que, implementadas adecuadamente, garantizarán la salubridad del agua potable.
”Aceptable. El agua ha de presentar un color, olor y sabor aceptables para ambos usos, personal y doméstico (…) Todas las instalaciones y servicios de agua deben ser culturalmente apropiados y sensibles al género, al ciclo de la vida y a las exigencias de privacidad.
”Físicamente accesible. Todo el mundo tiene derecho a unos servicios de agua y saneamiento accesibles físicamente dentro o situados en la inmediata cercanía del hogar, de las instituciones académicas, en el lugar de trabajo o las instituciones de salud. De acuerdo con la OMS, la fuente de agua debe encontrarse a menos de mil metros del hogar y el tiempo de desplazamiento para la recogida no debería superar los 30 minutos.
”Asequible. El agua y los servicios e instalaciones de acceso al agua deben ser asequibles para todos. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sugiere que el costo del agua no debería superar el 3% de los ingresos del hogar”.
Gerardo Pérez Muñoz indicó que al concesionarse el servicio se va a presentar un duro golpe a la economía y su costo no será de 3 por ciento de los ingresos del hogar, sino un negocio de particulares.