La criminalización de la protesta social y la falta de contrapesos en el Estado de Puebla, convierte a la entidad en una bomba de tiempo, afirmó el rector de la Ibero Puebla, Fernando Fernández Font.

En el marco de su primer informe, Fernández Font afirmó que un problema palpable, es que cada vez existen menos contrapesos, “como la aprobación de la ley bala, que fue tersa y rápida, poco discutida, lo que nos habla de un Congreso a modo, para responder a los intereses del poder ejecutivo”. 

El rector de la Universidad Iberoamericana también señaló que la ausencia de los contrapesos estuvo presente en el tema de las expropiaciones, las que no se avalaron con el consenso social.

Asimismo, subrayó que en Puebla no se hace política en función de una mayor democracia, situación que se refleja en los sectores público y privado, quienes hacen alianzas entre poderosos para conservar los privilegios, “por eso es que tenemos una situación como la actual”.

De seguir así, advirtió el rector jesuita, se condena al Estado de Puebla, a que continúen los problemas.

Criminalizar derecho a protestar no es democrático
Fernández Font, aseguró que criminalizar el derecho de las personas, a protestar, no responde a una sociedad democrática, porque recordó que los ciudadanos tienen el derecho de manifestarse ante los poderes político y privado.

Afirmó que otro problema son los infiltrados en las manifestaciones sociales: “cuando se meten vándalos o personas, a veces pagadas por la misma autoridad, ahí estamos teniendo un problema diferente”.