Para sorpresa de los habitantes de la ciudad de Puebla, y bajo total hermetismo, la empresa Demovial comenzó a levantar el concreto hidráulico de la millonaria modernización de la avenida Las Torres.

Versiones de algunos trabajadores de la constructora indican que encontraron grietas en varios tramos de la construcción, donde expertos en geodesia realizaron estudios y confirmaron que el concreto hidráulico colocado en semanas pasadas carecía de la calidad necesaria.

Un vecino de la obra, propietario de un taller de servicio mecánico automotriz, que no quiso revelar su nombre, aseguró que es una total irresponsabilidad del gobierno del estado invertir tanto dinero, “que no es del gobernador Rafael Moreno Valle, sino de todos los poblanos”, en una obra mal hecha y de pésima calidad.

La obra, que todavía no es inaugurada oficialmente, representó una inversión superior a los 444 millones de pesos, realizada con los recursos de los poblanos, sin embargo, ahora que levantan el concreto hidráulico, habrá que preguntar al gobierno del estado quién absorberá esos costos.

Los desperfectos de la vialidad se presentan entre la 11 Sur y Avenida Nacional, pero también entre la 10 y la 14 Sur, lo que generó la molestia de los propietarios de los negocios de la zona, que desde el pasado mes de septiembre ven afectadas las ventas, pero que ahora se reducen las posibilidades de recuperar sus inversiones.

Grietas al por mayor
Y aunque los encargados de obra se negaron a realizar algún comentario del levantamiento del concreto hidráulico, otros trabajadores aseguraron que se presentaron grietas en el pavimento recientemente colocado.

Ante eso, expertos en geodesia recorrieron la obra, verificaron los daños y ordenaron levantar una parte importante del concreto hidráulico, que era trasladado de la avenida Las Torres hacia un terreno cercano, en camiones de volteo.

Millonaria inversión, a la basura
Es increíble, dijo un vecino del fraccionamiento Rinconada Las Torres, que una obra millonaria sea echada a la basura por la irresponsabilidad de una empresa constructora, “que seguro quiso ahorrarse recursos”, y de un gobierno irresponsable que no supervisó adecuadamente los trabajos.

El descontento social fue complementado por los automovilistas de avenida Las Torres, quienes sonaban el claxon al pasar por los trabajos que llevaban a cabo los trabajadores, incluso algunos se bajaron a preguntar sobre las afectaciones que se llevan a cabo y el tiempo en que permanecerá cerrada la vialidad.

Los comerciantes de la zona se impresionaron cuando los trabajadores de la constructora Demovial comenzaron a levantar el pavimento con concreto hidráulico en varios tramos de la avenida Las Torres.

El descontento de los vecinos y de los comerciantes de la zona se hizo evidente porque los perjuicios se incrementarán por más tiempo, y los tiempos de traslado también seguirán siendo un problema.

Desde septiembre pasado y toda la temporada de fin de año, nuestros negocios resultaron afectados, afirmó el propietario de una lavandería ubicada sobre avenida Las Torres, entre la 11 Sur y avenida Nacional

El concurso de obra
Desde agosto pasado se lanzó la convocatoria para la construcción con concreto hidráulico de la avenida Las Torres, en la que participaron 15 empresas del país, pero fue la constructora Demovial la que se adjudicó la obra de modernización y prolongación de la vialidad.

Formalmente, la obra arrancó el 8 de septiembre y es encabezada por la Secretaría de Infraestructura, a cargo de José Cabalán Macari Álvaro.
La obra es una vía intermedia entre el circuito Juan Pablo II y el Periférico Ecológico, y se trata de 11.4 kilómetros de longitud, donde se lleva a cabo el cambio del concreto asfáltico por concreto hidráulico.

El proyecto está considerado a tres carriles por cada sentido, lo que representa un nuevo eje vial de la obra anterior, y propone beneficios para más de 100 mil personas.


La obra inició sin estrella
En el proceso de aprobación del proyecto, la Semarnat requirió en varias ocasiones la manifestación de impacto ambiental de la obra para autorizarlo, y el gobierno del estado tuvo que presentar un nuevo proyecto cada vez que recibía observaciones.

Las obras comenzaron pese a que todavía estaban en proceso la autorización de impacto ambiental, y durante el proceso se derribaron locales comerciales y se expropiaron propiedades y negocios, por lo que se aplicó por primera ocasión la “ley Eukid”, relacionada con la expropiación de terrenos.

El dato
El proyecto considera la construcción de un distribuidor vial que atraviesa las colonias La Concepción, La Cruz, San Martinito, El Molinito y Emiliano Zapata.