Diversos medicamentos, aceite, frijol, sopas, atún, entre otros productos básicos, fueron entregados a exburócratas despedidos por el gobierno del estado, luego de la colecta que comenzó la semana pasada.
Este domingo, en el Parque Juárez fueron beneficiados 19 personas de la tercera edad, quienes se encuentran desempleados desde el recorte de personal en distintas dependencias estatales.
La colecta comenzó la semana pasada en las puertas de la Secretaría de Finanzas y Administración, en la que se pretende apoyar a personas que no han encontrado trabajo y literalmente no tienen para comer.
Además, los burócratas despedidos por el gobierno de Puebla iniciaron una bolsa de trabajo, luego de las penurias que están pasando desde que fueron dados de baja.
El abogado defensor, Abelardo Cuellar Delgado, informó los pasos a seguir, entre ellos la instalación de centros de acopio en las puertas de dependencias estatales.
Desde 2011 se han dado de baja a más de 14 mil personas de la plantilla del gobierno de Rafael Moreno Valle, los últimos mil 500 tan solo en los últimos meses.
Los centros de acopio se instalarían un día después de cada quincena en alguna de las tres dependencias que acordaron, como la SFA, Tribunal Superior de Justicia o el Centro Integral de Servicios (CIS).
De este modo, se está impulsando una “farmacia móvil”, donde se busca obtener medicamentos donados, por aquellos que no los necesitan para distribuirlos con despedidos enfermos o algún familiar.
“La farmacia será no solo para los compañeros, se hará con la participación de la ciudadanía”.
Un caso en miles
Doña Guadalupe (se cambió nombre al solicitar anonimato) ahora tiene que levantarse a muy temprana todos los días para comprar un periódico y leer la sección de empleos.
Ella trabajó cerca de tres décadas como cajera de uno de los Montes de Piedad pertenecientes al ahora extinto Instituto para la Asistencia Pública del Estado de Puebla (Iapep), por lo que supuestamente estaba protegida por el sindicato.
Dijo que irónicamente regresó al Monte de Piedad pero ahora a empeñar unas joyitas por las que le dieron 300 pesos, ya que no tenía ni para comer.
Señaló que como finiquito le entregaron un cheque por cerca de cien mil pesos, los que sirvieron para pagar una construcción en la casa de su hija.
—¿Pero sí aceptó el dinero, obvio tenía que renunciar, entonces cuál es el reclamo?
—Estoy de acuerdo que ya me beneficiaron con el dinero, pero lo agarramos porque Posadas (líder sindical) nos convenció, además se aprovecharon de nuestra necesidad.
“Yo no quería, sabía que a la larga iba a perder más, pero nos prometieron la pensión y el doctor, pero fue un engaño”, dijo entre lágrimas.
Mary Cruz Ramírez, también exempleada del Iapep, dependencia recién desaparecida, señaló que es muy complicado encontrar ahora trabajo.
“Yo tenía 24 años trabajando en el Iapep, en los Montes de Piedad, pero injustificadamente un día el gobernador dijo adiós, aunque nos dijeron que nos iban a reubicar.”
—¿Usted de que está viviendo?
—Pues de nada, lavando ajeno, de lo que sea, vendiendo tortas.
Los juicios
Más de 550 juicios laborales de burócratas despedidos —apenas desde marzo a junio de 2015— se encuentran congelados en los juzgados del Tribunal de Arbitraje con argucias ilegales.
Estos se sumarían a por lo menos otros 500 juicios que tiene el gobierno del Estado en su contra por despidos injustificados desde que inició el sexenio de Rafael Moreno valle.
Mientras tanto, solo 10 exburócratas de los más de 14 mil despedidos en la actual administración estatal lograron ganar sus juicios con la reinstalación en sus puestos.
Abelardo Cuellar, señaló que en la última reunión con el presidente del tribunal de Arbitraje, Joel Figueroa Tentori, se señaló que hay 550 casos en la congeladora.
Explicó que Figueroa Tentori está retrasando o poniendo obstáculos a los procesos, como por ejemplo, al citar a los demandantes parea que se presenten en los juzgados como manera de identificación.
En caso de no hacerlom, en tres días, su proceso se va a la congeladora o al archivo, aunque en la ley nunca se establece este procedimiento.
De este modo los despedidos, tienen que ir a un juicio de amparo para que un juez federal ordene al Tribunal de Arbitraje llevar el procedimiento conforme a ley, pero en lo que se resuelve, pasan varios meses.
En tanto, los diez burócratas rescindidos injustamente serían reinstalados en noviembre o diciembre de este año debido a que ya ganaron juicios de amparos.
Explicó que hay tres tipos de amparos relacionados con los exburócratas.
El primero esa para que no obstaculicen el inicio de la admisión de las demandas, donde están requiriendo al Tribunal de Conciliación y Arbitraje para que emplace a las dependencias y hecho lo anterior señale día y hora para la audiencia de ley.
“De este tipo hay 200 amparos, trabajadores que demandaron de marzo a la fecha”, señaló.
Otros amparos que se están tramitando son para aquellos asuntos que ya se agotaron todas sus pruebas y que ya se tiene que dictar una sentencia.
En estos casos los jueces federales están ordenando que el Tribunal de Arbitraje dicte los laudos y se estima que en este mes o septiembre estará un número aproximado de 30 expedientes con resoluciones.
El tercer paquete de amparos, destacó, son los directos, que se han tramitado contra laudos dictados en el tribunal.
Aquí hay casos que han protegido los jueces federales a los demandantes y han ordenado al Tribunal dictar resoluciones a su favor.
“Son los más avanzados, son diez expedientes, trabajadores en donde condenan a la reinstalaciones, y estamos en una etapa de ejecución”, señaló en entrevista.
Desde su perspectiva, lo que preocupa y ocupa, es que todos los salarios caídos y prestaciones que el gobierno del estado cubra serán a cargo de la ciudadanía y no del bolsillo del ejecutivo estatal.