En medio de la ola de feminicidios y violencia contra las mujeres en Puebla, se anunció la octava edición de la “Marcha de las Putas”, pues en el estado existe “nula justicia” para las víctimas, sentenciaron activistas en rueda de prensa.

De acuerdo con datos del Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) se han registrado 405 casos de feminicidios y de estos solo hay un sentenciado en el periodo que comprende de 2013 a lo que va del 2018.

Además, datos de la Fiscalía General del Estado (FGE) obtenidos por el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) indicaron que ente 2015 y 2016 desaparecieron 820 mujeres, de las cuales seis fueron encontradas muertas y 300 no han sido localizadas.

Las activistas aseguraron que las autoridades de los tres niveles de gobierno no han atendido el problema contra mujeres, al no crearse acciones contundentes para evitarlo.

Gabriela Cortes Cabrera y Mónica Ponce, integrantes de las organizaciones como “El Taller”, y Rubí Cervantes, del Colectivo Hablemos de Género, detallaron que la marcha se realizará el próximo domingo 14 de octubre.

Indicaron que mientras no se registre un cambio en la procuración de justicia para las mujeres, seguirán exigiéndolo sin importar el gobierno en turno. “Desgraciadamente en el estado se siguen victimizando y sistematizando a las mujeres, ya sea por la manera de vestirse o si queremos salir a tomar en la noche”, acusaron.

A la mujer, denunciaron, se le hace responsable en caso de que le pase algo, incluso hay algunos medios de comunicación que juegan este papel con “notas amarillistas” mal redactadas donde las revictimizan.

La omisión de la violencia se ha reflejado en una alarmante estimación de feminicidios del 2013 al 2018, señalaron al revelar las cifras, detallando que en los primeros diez meses de este año, se han registrado aproximadamente 62 casos de feminicidios, según un seguimiento mediático.

Por lo tanto, resaltaron que hace falta centralizar la información, pues consideraron que hay “muchos casos” que no se conocen. Tan solo, al año pasado se registraron 276 mujeres desaparecidas, de las cuales no se supo el paradero de 27.

“Se debe a que en Puebla se encuentra en el corredor de trata de mujeres, lo cual sumado a la impunidad en la que se vive complica el acceso a la procuración de justicia de las familias”, dijo Gabriela Cortés.

Al recriminar la falta de la activación de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM), señalaron que esto también será parte de la exigencia en la marcha. Y es que recordaron que desde 2016, la respuesta de los gobernantes ha sido minimizar la vulnerabilidad a la que están expuestas.

Manifestaron que, más allá de combatir el problema, lo que se ha hecho es revictimizar a las mujeres a través de los estereotipos de género, que lo único que hacen es justificar a los responsables y reproduciendo la violencia.

“Nos criminalizan por manifestarnos, por exigir el ejercicio de nuestros derechos humanos, cuando éstos no responden a la moralidad del estado que aún se rige por los valores religiosos”, subrayaron.

De este modo, señalaron que la violencia se da en todas las edades y sectores, sin importar la etnia u nivel socioeconómico, debido a que se vive en un estado heteropatriarcal, en el que no se reconoce a las mujeres y las leyes no están pensadas para este sector.

La movilización que se realizará tiene el objetivo de visibilizar la vulnerabilidad en las que se encuentra este sector femenino, con la consigna “Todas putas, todas diversas, todas contra la heteronorma”.

La marcha partirá del reloj del Gallito, en la 11 Sur y avenida Reforma, para concluir en el zócalo de la ciudad, en donde realizan un mitin.

La Marcha de las Putas nació en Canadá en 2011 como la “Slut Walk”, una caminata provocada por el comentario de un policía que aseguró que, para evitar ser víctimas de violaciones y violencia sexual, las mujeres debían evitar “vestirse como putas”.

Lo que recibió por respuesta fue una manifestación de mujeres que salieron a las calles de Toronto vestidas con aquellas prendas consideradas como “incitadoras”, a exigir cese a la violencia sexual y a la cultura en la que la víctima es la culpable de los ataques en su contra.

Este año la Marcha de las Putas será en repudio a la violencia feminicida, que solo en lo que va del 2018 ha cobrado la vida de 62 mujeres, cuyos casos no han sido investigados ni esclarecidos.