En los últimos 90 años Puebla ha sido cuna de caciques que han llegado al poder, algunas familias teniendo la gubernatura, mientras otros el poderío económico o político, siendo el cacicazgo de los Ávila Camacho el más sangriento y antidemocrático, el cual favoreció el surgimiento de grupos de ultraderecha.

El jefe del avilacamachismo fue Maximino Ávila Camacho, general revolucionario cuya nieta, Citlali Ibáñez Camacho, hoy conocida como Yeidckol Polevnsky es la dirigente del partido gobernante en el país.

En 1937, Maximino se convirtió en gobernador de Puebla y, con la anuencia del entonces presidente Lázaro Cárdenas del Río, su poder en el estado fue ilimitado; gobernó con mano dura, dictatorialmente y concentrando todo el poder en él mismo.

Controló al lado de Fidel Velázquez y Blas Chumacero la CTM, mientras en Atlixco se aliaba con Antonio J. Hernández para eliminar a los opositores, uno de ellos Manuel Rivera Anaya, dirigente nacional de la Federación Revolucionaria Obrera Campesina (FROC).

El general fundó en su estado un grupo político que coptó el poder hasta 1975 y bajo su mando se formaron varios políticos de renombre, el más destacado sería Gustavo Díaz Ordaz, quien llegó a la presidencia de la República, pero también estuvo su hermano Rafael, quien fue gobernador, así como el general Antonio Nava Castillo.

Participó combatiendo a los cristeros, pero permitió que en Puebla operarán los grupos sinarquistas que apoyaban a Adolfo Hitler.

De acuerdo con sus biógrafos, Maximino encarnaba a lo peor de la clase política mexicana, la hizo más perversa y corrupta. Se le responsabilizaba por la muerte o la desventura de más de uno de sus adversarios.

La elección sangrienta

En 1940 para la elección presidencial, él mismo organizó las filas para la votación a fin de identificar a los opositores al gobierno. Según relatos, el general estuvo presente en casillas como la de Juventud Revolucionaria, que se encuentra en la zona del Calvario.

Posteriormente hubo desapariciones y asesinatos de disidentes políticos; los perseguidos tuvieron que esconderse en la zona de los volcanes.

Finalmente, su hermano Manuel Ávila Camacho fue electo y Maximimo esperaba un puesto de primer orden en el gabinete y con toda seguridad la presidencia en el siguiente periodo, sin embargo, Manuel no lo nombró como secretario pretextando que aún le restaban dos meses como gobernador de Puebla.

Maximino se vio forzado a permanecer en la gubernatura pero comenzó a atacar a los comunistas del gabinete. Manuel Ávila Camacho, que tampoco era muy proclive a la izquierda, aprovechó estas protestas, que muchos sectores derechistas del país secundaban para separar a los secretarios señalados como izquierdistas y, por lo tanto, cercanos a Cárdenas, para llevar al país a la derecha.

El mito

Maximino Ávila Camacho no titubeaba en los medios para satisfacer sus deseos. Era seductor con las mujeres y, con los hombres, ejercía el encanto del macho alfa. Amante de los toros y los caballos, con frecuencia se le veía en los cosos retando a la muerte; vestido de corto, montaba gallardo acompañado de alguna de sus bellas amantes sin el temor de verse descubierto. Era soberbio y ególatra.

Otra cita sobre el general es "Vive siempre dentro de una realidad dulce o cruel...", decía el periodista Regino Hernández Llergo, "huye de la mentira en todas sus formas. Siempre conoce, en una palabra, el terreno que pisa. Y es tan profundamente humano, que igual sería capaz de ahorcarse él mismo si su deber se lo exigiera, que llorar ante el drama de un amigo. Ese es Maximino Ávila Camacho, el hombre con gran parecido físico y moral a Mussolini". El lambiscón de Salvador Novo no lo bajaba de nacionalista y patriota. Lo cierto es que lo mismo era temido que admirado, por tirios y por troyanos.

A principios de 1945, Maximino murió durante una comida en su honor. Dicen que lo envenenaron.

Rafael y "El Yunque"

El caso de Rafael Ávila Camacho, militar de carrera, fue el presidente Miguel Alemán, quien lo designó como Director del Heroico Colegio Militar en 1948 y, para el primero de febrero de 1951 tomó protesta como Gobernador Constitucional de Puebla. Durante su gobierno la Universidad de Puebla obtuvo su autonomía en 1956.

Durante la administración del menor de los Ávila Camacho se crearon los grupos de Ultra Derecha “El Yunque”, así como el Pentatlón Militarizado, la Academia Ignacio Zaragoza entre otros.

Rafael Ávila se le consideró un gobernador de línea dura contra la izquierda y es cuando inicia la lucha que se extendería hasta principios de los años setenta.

La Nieta

La nieta Yeidkol Polevnsky, cuya madre era Guillermina Camacho Amezcua, hija de Maximino Ávila Camacho, cambio de nombre en tres ocasiones, luego de presuntamente haber sido víctima de violencia sexual a los 12 años en un intento por protegerla a ella y al resto de sus hermanas –Xóchitl, Yolólt y Tonantzin– del escarnio público.

Con datos confusos, sobre todo en lo que se refiere a su supuesto parentesco con la familia Ávila Camacho, de las formas jurídicas por las que obtuvo su cambio de nombre y la controversia por su título, ya que se ostentaba como licenciada en psicología.

Yeidkol se niega a hablar del pasado familiar marcado con una historia de sangre y represión, principalmente en Puebla.