Al recibir su constancia de mayoría como gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta Mier, dijo que una vez concluida la etapa de competencia, comenzará por restablecer la “nueva gobernabilidad” en el estado durante los próximos seis meses de transición en el poder y a partir de diciembre cuando asuma su mandato.

Este domingo el morenista acudió al edificio del Instituto Electoral del Estado (IEE) sobre muletas tras su operación del talón del pie derecho, donde fue recibido por un copioso número de simpatizantes, y desde ahí ofreció trabajar a partir de hoy por el proyecto de gobierno que prometió en campaña, y en este sentido, agradeció a los candidatos opositores Eduardo Rivera y Fernando Morales por su visión democrática al aceptar su triunfo.

Señaló que ahora viene la etapa de “dar resultados”, para corresponder a la confianza de los ciudadanos que el 2 de junio votaron por él y también por aquellos que no confían en la 4T.

“Cerramos la etapa de la competencia. Vamos por construir la etapa de la gobernabilidad. La elección nos da legalidad y elegibilidad, pero ahora nos toca construir la gobernabilidad. Son seis meses donde la ruta de la transición se hará de manera respetuosa, cordial y conciliadora, en función de la postura mostrada por el gobernador del estado, pero estaremos trabajando desde ya para que el ritmo de Puebla sea el que merecemos”, apuntó.

De nueva cuenta, Alejandro Armenta, quien contendió por la coalición integrada por Morena-PT-PVEM-Panal y Fuerza por México, manifestó que el triunfo de este frente, es el triunfo del proyecto de nación de la Cuarta Transformación de Andrés Manuel López Obrador, y ahora lo será también de la política del humanismo social, que encabezará Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta electa de México.

En cuanto a Puebla y lo que hará al asumir la gubernatura, ofreció “un gobierno cercano, un gobierno articulado con la vida social, un gobierno inclusivo, un gobierno que haga feliz a los ciudadanos, que cumpla con los derechos sociales, que atienda a los desprotegidos, que compense a los que menos tienen y más necesitan”.

Más allá de pregonar los principios de la 4T, el exsenador afirmó que los llevará a cabo: no mentir, no robar y no traicionar al pueblo.

“Ser el gobernador electo implica un llamado a dar resultados, con la visión de desarrollo que Puebla merece, para tener la Puebla que todos anhelamos (…) En esa lógica, que Dios nos permita trabajar hasta el final, me consagraré a servir a las y los poblanos”, enfatizó.  

La llegada de Armenta hasta la puerta del IEE se dio en medio de aplausos y gritos de ¡Gobernador! ¡Gobernador!, a lo lejos se le vio descender de su camioneta acompañado por su esposa Cecilia Arellano, sus hijos y su perro Tommy.

Entre los asistentes al acto oficial estuvieron además el presidente municipal electo de Puebla, José Chedraui Budib, y su coordinador de campaña, Rodrigo Abdala, mientras que en las inmediaciones del lugar se observó a diputados federales y locales electos.