Ante miembros de la Comisión Permanente, Edmundo Tlatehui, reconoció que el PAN vive su peor crisis político-electoral de su historia en Puebla, es decir, “el PAN en Puebla está hecho pedazos” y urge una recomposición.

Insistió que ante el panorama adverso, la militancia panista debe ser la que decida la próxima dirigencia de Acción Nacional.

El mensaje de Edmundo fue contundente al no ignorar la peor crisis que atraviesa el blanquiazul en Puebla, y que si no se toman acciones firmes, sí hay escenarios más catastróficos a los que se pueden llegar.

Aseveró hay que hacer partícipe a la base del partido para recuperarlo, que no se convierta en aquello a lo que debe hacer contrapeso, y que sea la oposición que Puebla y México necesitan.

“He decidido asistir a esta reunión con el ánimo de construir y de sumar y nunca dividir”, señaló, al insistir que su asistencia fue con la esperanza, no con ingenuidad, de que no habrá desaseo político.

“Empezaría por afirmar que hoy el PAN vive la peor crisis política-electoral de su historia en Puebla. Debemos admitir que esta derrota es una verdadera tragedia para nuestro partido”, sostuvo.

Indicó que sería muy irresponsable evadir o negar la triste realidad, que viven los panistas y que está a la vista de la sociedad. “Lo quiero decir con estas palabras: El PAN en Puebla está hecho pedazos”, añadió.

Por lo tanto dijo a los panistas que sino asumen con verdadera responsabilidad política esta crisis y emprenden acciones muy pronto para reconstruir lo que quedó del panismo poblano, no podrán salir de esta lamentable situación.

“Por el contrario, corremos el riesgo de caminar con la misma suerte del PRD y el PRI. Y no estoy exagerando, compañeras y compañeros panistas”, aseveró.

Recordó que el Partido de la Revolución Democrática (PRD), perderá su registro y el Revolucionario Institucional (PRI) está a muy poco de perderlo.

“Las verdades son incómodas y estoy seguro que mi opinión les molesta a varios de los presentes”, dijo al aclarar que no culpa a nadie de manera individual o colectiva.

“Esta reunión no tiene por qué convertirse en una cena de negros. Lo que digo con claridad es que, si hay honestidad política de las y los diferentes actores y militantes, y de verdad queremos sacar de esta crisis al PAN, debemos empezar por reconocer esta tragedia”, indicó.

Por lo tanto, dijo que se necesita elaborar una agenda de trabajo para abrir espacios de análisis y reflexión que incluyan a la militancia y por qué no, que participen por invitación analistas, académicos, investigadores de gran prestigio que desde la academia han investigado al PAN como objeto de estudio.

De este modo dijo que deben ser las y los militantes, “sólo ellos, nadie más, los que decidan”, quienes deberán dirigir al PAN en el estado.

“Debe ser la militancia la que decida libre y democráticamente quién va dirigir al PAN en los próximos años. Sería una pésima y muy desafortunada decisión manipular el proceso para que sea el consejo estatal y no la militancia la que decida quiénes serán los próximos dirigentes”, añadió.