En medio de un contexto internacional tenso y a tan solo unas horas de que venza el plazo de emplazamiento a huelga en la planta de Audi en Puebla, el gobernador Alejandro Armenta Mier manifestó su respaldo total tanto a los trabajadores como a los inversionistas de la automotriz. Al mismo tiempo, aprovechó para lanzar un llamado a Estados Unidos: “México es un hermano aliado, no un enemigo”.

Durante su intervención, posterior a una jornada comunitaria, Armenta fue contundente al señalar que, si bien el conflicto en Audi es de índole laboral y federal, su gobierno estará atento a que se llegue a un acuerdo que beneficie a todas las partes.

“Todo el apoyo a los factores de producción, a la conciliación”, dijo el mandatario.

Pero fue más allá y colocó el tema en un contexto geopolítico mayor. “Estamos viviendo una etapa muy difícil, muy complicada en materia de relación con Estados Unidos”, advirtió, al referirse a las políticas restrictivas del país vecino que, aseguró, impactan directamente en temas como los aranceles y los acuerdos comerciales que afectan a la industria automotriz en México.

En un tono crítico pero diplomático, Armenta acusó que las expresiones de algunos actores políticos en EE.UU. son inaceptables, sobre todo cuando van dirigidas a migrantes mexicanos e indígenas.

“Un gobernante debe aprender el juego de la liga: aprietas y aflojas, no sólo aprietas, porque si aprietas, rompes la liga”, sentenció.

El gobernador poblano recordó que todos los imperios han tenido fecha de caducidad, en clara alusión a la soberbia de ciertas posturas estadounidenses.

“No estoy haciendo ninguna aseveración”, aclaró, “pero todos los imperios han caído: Mesopotamia, Egipto, Roma...”.

Reconoció que la presidenta Claudia Sheinbaum comprende la relevancia de mantener una relación diplomática sólida y equilibrada con Estados Unidos. “Ella sabe que a México y a Estados Unidos les conviene llevarse bien”, sostuvo.

Armenta también hizo un reconocimiento a la comunidad poblana en Nueva York y Los Ángeles, al destacar su participación en la economía norteamericana.

“Desde Puebla hacemos un llamado humilde a la cordura y al respeto. México ha demostrado solidaridad, incluso en tragedias como los incendios en California. Lo mínimo que pedimos es reciprocidad”, subrayó.

Así, Puebla no solo se posiciona como un estado con vocación industrial, sino también como voz activa en la defensa de los derechos laborales y de los migrantes, en un entorno internacional cada vez más polarizado.