El Coronavirus en Puebla también afecta y trastoca la vida de los familiares de quienes se encuentran hospitalizados en los diferentes nosocomios de Puebla capital y su área conurbada, donde se concentra el mayor número de contagios por Covid-19.
Este lunes, el equipo de reporteras y reporteros de Intolerancia Diario realizó un recorrido para conocer las condiciones que se viven afuera de los llamados Hospitales Covid, tanto los que dependen del gobierno del estado como aquellos que son responsabilidad de la federación, como el IMSS y el Issste.
Piden medicamentos en el HGS
Aunque no se trata de un nosocomio exclusivo para atender casos de Covid-19, el Hospital General del Sur (HGS), además de recibir a pacientes de consultas generales, tiene habilitada una zona para detectar y en su caso, asistir a enfermos de coronavirus.
Durante el lapso de una hora, al menos dos personas ingresaron a la zona de urgencias. Al preguntarle a uno de los familiares el motivo de su visita, prefirió no mencionar si su paciente era o no, un caso sospechoso de coronavirus.
Los poblanos que acudieron a recibir una consulta general o personas que tenían algún familiar internado por causas ajenas al Covid-19, dijeron tomar las medidas sanitarias pertinentes y aceptaron sentir temor por poder llegar a contraer esta enfermedad.
Así mismo denunciaron la falta de medicamentos para tratar a los pacientes, incluso apuntaron que en ocasiones se requiere que los familiares compren diferentes fármacos para continuar atendiendo a las personas internadas.
A las afueras del nosocomio, la vida sigue como si la enfermedad no existiera, pues además de la afluencia de pacientes y familiares que acude a recibir atención médica, se encuentran instalados varios negocios ambulantes de comida.
(Con información de Dulce Fernanda Torres)
Saturación y falta de información, la constante en el IMSS
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) atiende a los derechohabientes que presentan coronavirus junto a quienes padecen otras enfermedades, lo cual aumenta el riesgo de más contagios.
“Están revueltos, en urgencias hay un área de aislamiento, pero están en urgencias, hay personas que han entrado con ese mismo motivo por Covid-19 los tienen como pacientes en esa área, cuando ven que ya están confirmados los pasan, pero mientras están con las demás personas”, dijo Edith Pérez familiar de un enfermo internado en el hospital de La Margarita.
Además de la saturación, la mala relación entre personal médico y familiares de pacientes es común, pues la falta de información del estado de salud de los pacientes provoca el enojo y el estrés.
Catalina Nicanor llegó desde Zacatlán de las Manzanas y espera afuera de San José, su nuera Martha N. está hospitalizada a causa del Covid-19. Además de padecer diabetes, la economía de Catalina no está bien, para las una de la tarde, cuando se le entrevistó, ella seguía sin desayunar por falta de recursos. Perdió su trabajo a causa de los recortes.
“Mi hijo es al que le han dicho que sí que la tienen entubada, apenas venimos. Yo no soy de acá, vengo de Zacatlán de las Manzanas, pero la situación es que yo me voy a tener que retirar porque estoy diabética y es a lo que me estoy arriesgando mucho, pero como mi hijo no viene, tengo que venir”, refiere.
Mientras las autoridades de salud hacen campañas para evitar el consumo del tabaco, ya que esto puede ser mortal para enfermos Covid-19, personal médico de La Margarita toma unos minutos de su extenuante jornada para fumar afuera del nosocomio y así eliminar el estrés que provoca su labor en tiempos de pandemia.
Afuera de las áreas de urgencias, el comercio ambulante hace su agosto, se venden desde cubrebocas, mascarillas, guantes y playeras, hasta comida sin la mayor higiene.
(Con información de Yazmín Curiel)
Faltan médicos especializados en los hospitales Covid
Angustia, miedo, y desinformación, se vive diariamente a las afueras de los Hospitales Covid de Cholula y Traumatología de la Secretaría de Salud de Puebla. Al interior los médicos no se dan abasto, pero no por falta de camas ni ventiladores, sino por la carencia de más personal especializado.
Mientras, carrozas fúnebres con sus empleados esperan las 24 horas pacientemente estacionadas a un lado de los nosocomios, como si se tratara de sitios de taxis. Una vez que se les hace el llamado, inmediatamente los empleados se colocan los overoles, caretas, guantes y equipo e ingresan con la unidad para recoger los cuerpos de fallecidos por Covid-19.
Aunque no se han saturado ninguno de los dos nosocomios citados, en el recorrido de este lunes, se pudo contabilizar al menos a 12 personas esperando noticias en el hospital de Traumatología de la Secretaría de Salud y otras 23 en el General de San Andrés Cholula.
Aunque están llegando en promedio hasta 25 personas diarias con síntomas de Covid-19, no todos son internados, sólo los más graves, quienes presentan problemas respiratorios avanzados, así lo señaló a Intolerancia Diario, una médico que está en la primera línea de batalla desde donde trata directamente a los pacientes enfermos del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que produce la enfermedad Covid-19.
Explicó, al pedir anonimato, que el problema de la falta de médicos se ha dado por varios años, pero ante la pandemia se ha hecho más notorio: “El déficit de médicos no se ha logrado abatir, sobre todo que tengan especialidad en este tipo de patologías, hay médicos generales que no sería el prototipo o perfil para este tipo de pacientes”, sostuvo.
Aunque no quisieron dar entrevistas por temor a represalias, si señalaron que se están dando hasta 20 servicios diarios, cuyos cadáveres se llevan a incinerar y entregar en mínimo dos días a los deudos.
(Con información de Jorge Castillo)
ISSSTE e ISSSTEP, saturados
Los dos principales hospitales de atención para los burócratas que hay en Puebla, que son el ISSSTEP e ISSSTE, desde mayo se encuentran saturados. Los pacientes con síntomas de Covid-19 deben esperar un tiempo para poder ser recibidos, y en el caso de la instancia federal se denuncia la carencia de ventiladores y equipo.
En el caso del ISSSTEP se tenían 70 camas al inicio de la pandemia, y se utilizó el área materno-infantil para la atención. El número creció a 82 espacios, todas ocupadas y se ocupará otro piso para poder albergar a un mayor número de pacientes, al no bajar la curva de contagio.
En el recorrido realizado por ambos hospitales, se observó el silencio de los familiares de los pacientes Covid. Al acercarse a quienes se encuentran en la vía pública esperando informes, todos ellos, dicen que esperan a una persona, o a un amigo que tiene un enfermo, pues para ellos parece que es motivo de vergüenza el que alguno de sus familiares se hubiera contagiado.
Los dos hospitales dejan pasar a los familiares, en el ISSSTEP los tienen en la puerta interior, sin que se respete la sana distancia, de acuerdo a las imágenes captadas por Intolerancia Diario.
(Con información de Francisco Sánchez)