Una de las empresas inspeccionadas será Foxconn, donde se ocasionaron múltiples suicidios. Las primeras conclusiones del informe se publicarán en marzo. El consejero delegado Tim Cook dijo que estas medidas "no tienen precedentes en la industria electrónica".
En el momento en que la acción de Apple supera, por primera vez, los 500 dólares en Wall Street, la empresa de la manzanita pone la lupa sobre las empresas chinas que funcionan como sus proveedoras. En asociación con Fair Labor Association (FLA), inspeccionará a la compañía taiwanesa Foxconn y a otras empresas que también realizan el ensamblado final de sus productos en China.
Como uno de los mayores proveedores de Apple, la firma de electrónica Foxconn quedó en evidencia en 2010 tras el suicidio de algunos de sus empleados. Asimismo, una explosión mató a cuatro trabajadores e hirió a 18 en una de sus plantas el año pasado.
“Las inspecciones ahora en curso no tienen precedentes en la industria electrónica, tanto por su escala como por su alcance”, afirmó Tim Cook, consejero delegado de la compañía. Y agregó: “Creemos que los trabajadores de todo el mundo tienen derecho a un entorno de trabajo seguro y justo y por eso hemos pedido a la FLA que evalúe de manera independiente el comportamiento de nuestros principales proveedores”.
En Nueva York y Londres, grupos de activistas protestaron contra las condiciones de trabajo en fábricas del país oriental.
Esta noticia se da en un contexto en que la empresa –fundada en 1975 por Steve Jobs- ocupa el primer puesto de un sondeo público sobre reputación realizado por la consultora Harris Interactive, destronando al buscador Google.
El informe anual sobre condiciones laborales fue publicado por Apple a principios de este año. Según el reporte, sólo el 38% de los proveedores había cumplido con la normativa de trabajar un máximo de 60 horas por semana y, en 108, no se habían pagado las horas extras.
Las primeras conclusiones de la investigación se conocerán en marzo, pues un equipo de expertos en derecho del trabajo dirigidos por el presidente de FLA, Auret van Heerden, ya comenzaron con las inspecciones en la fábrica de Foxconn en Shenzhen.
Del mismo modo, este tipo de conflictos se presenta para Microsoft, ya que desde enero investiga una amenaza de suicidio masivo en una disputa por pagos, que se habría llevado a cabo en una planta china donde se ensambla el Xbox. Como en el caso de Apple, la compañía implicada también es Foxconn.