Un doodle recuerda a Heinrich Rudolf Hertz, el físico alemán que descubrió las ondas electromagnéticas y se convirtió en padre de las telecomunicaciones.

Hertz nació el 22 de febrero de 1857 en la ciudad alemana de Hamburgo en el seno de una familia judía convertida al cristianismo. Desde muy temprana edad despuntó como tornero, y trabajó como artesano carpintero en su juventud.
 
Y aunque tuvo grandes dotes artísticas, pasó a la historia como el descubridor del efecto fotoeléctrico, la producción y propagación de las ondas que llevan su nombre, porque su pasión siempre fue la física.
 
Heinrich Rudolf Hertz estudió Física en Berlín junto Gustav Kirchhoff, con quien hizo diversas contribuciones al mundo científico. Luego de obtener su doctorado a los 23 años, fue profesor en la Universidad de Kiel. Aunque fue en la Universidad de Karlsruhe donde descubrió las ondas electromagnéticas, basándose en los estudios de James Clerk Maxwell y probando sus hipótesis.
 
Este miércoles se cumplen 155 años de su nacimiento, y Google quiso celebrarlo sustituyendo su logotipo habitual por unas ondas hertzianas oscilantes con los emblemáticos colores del buscador, emulando la captura de impulsos fotoeléctricos.
 
Hertz tuvo una breve pero intensa carrera, ya que murió joven, a los 36 años, debido a una septiciemia. Sin embargo, durante este corto espacio de tiempo, dejó grandes contribuciones al mundo de la física.
 
También se le debe el efecto fotoeléctrico, del que más tarde se servirían otros físicos para escribir sus teorías. Las bases teóricas de la propagación de ondas electromagnéticas fueron descritas por primera vez por James Clerk Maxwell. Entre 1886 y 1888, Hertz fue el primero en validar experimentalmente la teoría de Maxwell, de la cual Einstein y Marconi también se valdrían para sus investigaciones. A éste último los hallazgos de Hertz lo ayudaron además a montar un emisor de radio.
 
Desde 1930, las ondas electromagnéticas llevan su nombre, ondas hercianas, y el hercio es la unidad de medida de la frecuencia de las ondas y corresponde a un ciclo por segundo.
 
Pero ésta no es la primera vez que Google recurre a modificar su logotipo con un doodle para conmemorar algún aniversario, porque lo que más le gusta al principal buscador web del mundo es celebrar aniversarios sonados, homenajear a científicos, escritores, artistas... En definitiva, a personajes que marcaron una época o pasaron a la historia por sus hazañas. El último tributo fue hace una semana, al novelista inglés Charles Dickens.
 
Sin embargo, Google no vive exclusivamente de efemérides, ya que también ha aprovechado acontecimientos más concretos para doodlear. Así, son recordados los dedicados al eclipse lunar, en el cual el usuario podía ver todos los estados de la Luna durante el fenómeno astrológico; a la visita de la reina Isabel II a las instalaciones de Google o a los solsticios de verano e invierno.
 
El año pasado, San Valentín también tuvo su protagonismo para el gigante de Internet. Aunque también han sido motivo de doodles festividades como el Día de la Madre, el Día Internacional de la Mujer o la Navidad.