El aroma, similar al de la computadora portátil de Apple cuando recién es sacada de su envase original, se fabrica en Australia. "Los fanáticos podrán reconocerlo fácilmente", asegura la empresa que lo comercializa.

El singular perfume, a pesar de que despertó el interés de los seguidores de la compañía de Cupertino, no servirá para uso personal, sino que sólo se venderá para aromatizar tiendas.
 
Se trata de una mezcla de esencias hechas en Francia, que combinan pegamento, plástico, goma y papel, los mismos materiales que entran en juego al abrir el paquete con la Macbook.
 
La fragancia del dispositivo "recién salido de la fábrica" fue desarrollada por un grupo de artistas australianos, que integran la empresa Greatest Hits. Trabajaron en colaboración con Air Aroma, una firma que crea olores especiales para hacer marketing.
 
"Los fans de Apple podrán reconocer fácilmente el aroma", prometen sus inventores, Gavin Bell, Jarrah de Kuijer y Simon McGlinn, que presentaron el perfume en la exposición De facto Standard en Melbourne.