Foursquare, Instagram y Pinterest son algunas de las plataformas análogas a Twitter y Facebook. Sin fuerza para desbancarlas, se limitan a complementarlas. Infobae América consultó a especialistas en Social Media.
Prender la computadora y entrar casi de forma inconsciente, como un hábito incorporado, al perfil de Facebook y después a Twitter para mirar las últimas noticias. De ahí a revisar los likes de las imágenes de Instagram, continuar con un recorrido rápido por Pinterest y chequear novedades en Path.
 
La rutina es seguida, de manera más o menos similar, por el usuario promedio de las redes sociales. El universo de las plataformas, fiel a la teoría del Big Bang, se expande cada vez más y se torna inabarcable hasta para el cibernauta más fanatizado.
 
Mientras que Facebook, creada en 2006, es la clara reina de este Internet sideral con 900 millones de usuarios, y Twitter se alza con un trono aparte, otro tipo de redes sociales crece en la web. Pero, ¿qué espacio les queda realmente?, ¿y a quiénes pueden atraer?
 
"Las redes sociales con posibilidad de hacer algo interesante son, básicamente, las que explotan los espacios de uso que Facebook les dejó, porque no pueden competirle, pero sí en algunos nichos. La clave es encontrar un lugar en el que se pueda agregar valor, o que tenga facilidad de uso", explica Mariano Amartino, fundador de Überbin, consultora argentina de estrategias de Internet y Nuevos Medios.
 
En ese sentido, ilustra un ejemplo con Foursquare: "El objeto social de Facebook es la vida, que agrupa todo, hasta las actualizaciones de geolocalización. Pero en este aspecto, Facebook Places no puede ganarle a Foursquare, que da la posibilidad de compartir algo de forma más completa: dónde estás, con quién, ver el menú de un restaurante, o si estás en los Estados Unidos se puede, incluso, hacer reservas".  
 
Javier Vargas, consultor en Comunicación Digital, de Perú, coincide con esta visión. "Tendrán que ser más especializadas en un tema particular o intereses, y dirigidas a grupos específicos para lograr captar la atención, como Path, enfocada en agrupar a los contactos más cercanos o mejores amigos", indica con respecto a las plataformas sociales. Y agrega: "Hoy casi todos los espacios digitales están integrados a Facebook".
 
Por su parte, el vicepresidente de Publicidad y Marketing de la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI), Guillermo Pérebolde, sostiene que cada una de las redes tiene un "estilo y dinámica propios". "La gente no deja de usar Facebook para entrar a Pinterest, las utilizan en momentos diferentes", señala y aclara que esto provoca que los usuarios pasen más tiempo en Internet para poder usarlas a todas.
 
El futuro de las redes está, entonces, en saber hacerse un espacio entre los gigantes, que lo distinga por su utilidad. Eso quizás sirva para explicar el motivo del fracaso de Google +, la ambiciosa plataforma de Google que, en el rubro social, no logró lucirse.
 
Presentada como la elegida para desbancar a Facebook, no consigue usuarios activos. "Es una ridiculez que Google haya querido hacer una red social. Es como cuando Microsoft quiso meterse en el mundo de los buscadores. No se dedican a eso, no es parte de su ADN o cultura", asegura Amartino.
 
"Pone a los usuarios en el dilema de cambiar de plataforma, lo que difícilmente pueda ocurrir dado que los amigos y conocidos ya están en Facebook", añade Pérezbolde, mientras que Vargas resalta que no hizo algo diferente "que revolucione", como sí lo hizo su principal competencia.
 
Por el momento, todo parece indicar que, en tanto logren ocupar los puntos blancos que dejan Facebook y Twitter, las nuevas plataformas sociales seguirán creciendo en el ciberespacio. Aunque, como concluye Amartino, ante tanta oferta no se podrá evitar que las redes sigan tanto apareciendo, como muriendo en el desuso.