La venta de las patentes del pionero de la fotografía Kodak podría dar un giro inesperado: según publicó el Wall Street Journal, Apple y Google, normalmente acérrimos rivales, negocian aliarse para comprar el legado de la compañía a un buen precio y asegurarse de que no pueda ser usado en su contra.
De concretarse, la alianza podría significar también un cambio de rumbo en la dura guerra de patentes en el sector de la telefonía móvil.
En el acuerdo participarían, asimismo, grandes de la industria electrónica como Samsung, LG y HTC, así como firmas especializadas en la concesión de licencias sobre patentes.
La idea es que las patentes de Kodak no queden en manos de una única empresa que las pueda usar para generar más demandas judiciales. Esta decisión sería el primer indicio de que todas las partes se esfuerzan por evitar que la guerra de patentes se amplíe aún más.
En la actualidad hay decenas de juicios en muchos países, entre ellos justamente ahora uno de Apple contra Samsung en California.
Pese a todo, el Wall Street Journal alerta de que las negociaciones están apenas comenzando y que una colaboración de este tipo, además, podría llamar la atención de las autoridades antimonopolio.
Kodak necesita con urgencia el dinero de la venta de las 1.100 patentes para su relanzamiento como especialista en impresión.
A principios de año, la empresa había tasado el valor del paquete en hasta 2.600 millones de dólares (2.100 millones de euros), pero según el diario apenas ha recibido ofertas por 500 millones de dólares.
Ante la situación, Kodak extendió de manera ilimitada la fecha para la subasta y dijo que quizás sólo venda una parte de los derechos. La firma necesita los fondos para pagar créditos bancarios.
En realidad, Kodak apostaba por una fuerte disputa entre Apple y Google que le permitiera hacer ingentes ganancias, como ocurrió el año pasado con la empresa de redes informáticas Nortel, cuyo valor inflaron hasta los 4.500 millones de dólares.
Los vencedores en esa ocasión fueron Apple y Microsoft.