La empresa de biotecnología Colossal Biosciences ha declarado haber logrado revivir al lobo terrible (Aenocyon dirus), una especie que se extinguió hace más de 10 mil años. Este avance se habría conseguido mediante técnicas de ingeniería genética, según informó la revista Time. 

El proceso habría comenzado con la reconstrucción del genoma del lobo terrible a partir de ADN extraído de restos fósiles de 13 mil y 72 mil años de antigüedad. Posteriormente, se habrían editado células de lobo gris para que coincidieran con el genoma del cánido extinto.

Varias perras habrían gestado y dado a luz a tres cachorros, bautizados como Rómulo, Remo y Khaleesi, que actualmente se encontrarían en una reserva animal cuya ubicación no ha sido revelada. 

Este supuesto logro ha generado tanto entusiasmo como escepticismo en la comunidad científica. Algunos expertos destacan el potencial de la ingeniería genética para la conservación de especies, mientras que otros advierten sobre las implicaciones éticas y ecológicas de reintroducir especies extintas en los ecosistemas actuales.

Hasta el momento, Colossal Biosciences no ha publicado detalles específicos del procedimiento ni estudios revisados por pares que respalden sus afirmaciones, lo que ha llevado a la comunidad científica a esperar más información antes de emitir juicios definitivos.

La noticia ha reavivado el debate sobre la desextinción y sus posibles aplicaciones en la conservación de la biodiversidad, así como las consideraciones éticas y prácticas que conlleva traer de vuelta a especies desaparecidas.​