Si por algo se ha caracterizado siempre el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, es por estar muy bien informado.
Fanático de las encuestas y de los estudios de opinión, el gobernador poblano no da un paso si antes no consulta a las grandes empresas; sus consentidas: Parametría, de Paco Abundis y Gea-Issa.
Por eso llama la atención que ahora el mandatario estatal se haya lanzado, así como así, a una aventura llamada Ernesto Cordero, considerado el “delfín” del presidente Calderón, pero el cual no alcanza ni los siete puntos en conocimiento y ya no se diga en intención de voto.
Pareciera una locura por parte del gobernador de Puebla apoyar de una manera tan abierta a alguien tan mediocre como resultó ser el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, del cual incluso ya hasta es coordinador de su campaña.
Entonces, ¿qué empuja a Moreno Valle hacerlo? ¿Qué sabe el gobernador de Puebla que los demás no entendemos? Sin duda algo más que cualquiera de los que solo vemos a los toros desde la barrera.
Y es que, insisto, si algo ha caracterizado siempre al gobernador es que no se lanza a ninguna aventura; siempre trae buena información a su lado, acompañándolo, lo que le permite dar golpes espectaculares y siempre obtener rendimientos.
¿Su lealtad hacia el presidente Calderón? Hmmm… lo dudo, la formación de Moreno Valle es netamente pragmática, lo que sirve hay que darle uso, lo que no sirve se tira y se desecha, ésa es su máxima.
Algo sabe el gobernador de Puebla, tal vez que Cordero puede ser más bien “un borrego”, una estrategia muy bien articulada para distraer a la opinión pública y ocultar a la verdadera pieza del presidente de la República quien, insisto de nuevo, difícilmente se dejará arrebatar lo que tanto trabajo le costó ganar a Acción Nacional.
Tal vez Moreno Valle solo es parte de esa gran puesta en escena, o tal vez conoce, sabe algo que nadie alcanzar a entender: por qué el presidente de la República está empeñado en impulsar las aspiraciones de un hombre al que se le ven pocas posibilidades de llevar a buen puerto al PAN.
Será acaso que es el propio Moreno Valle el “plan B” del presidente de la República, como ya lo plantee en una columna anterior.
El periodista Pablo Ruiz Meza, en su columna “Nada Personal”, que se publica en Milenio Puebla, señala que tal vez es porque a Moreno Valle le gustan los retos; tal vez sea una buena respuesta, pero vaya reto que se echó encima el gobernador de Puebla, sobre todo tomando en cuenta que 50 por ciento de los mexicanos reprueba el trabajo del presidente Calderón.
La mano que ayudó a Blanca
Dicen que una mano misteriosa se movió desde alguna oficina gubernamental para llamar al rector Derbez y pedirle que “por favor ayudará a Blanca”.
Pero que tampoco nadie se confunda, el gobernador no ha perdonado a la expresidenta municipal de Puebla. Lo que cuentan, es a los morenovallistas no les ha gustado la forma en que el alcalde Rivera Pérez busca marcar una diferencia entre su administración y la de Casa Puebla en materia de combate a la corrupción.
Lo ven como una afrenta, como un mensaje en el sentido de que Rivera combate la corrupción, mientras que el gobernador prefirió pactar. Eso molestó a los nuevos amos de Puebla, que optaron por enviarle un mensaje al presidente municipal en el sentido de “ten cuidado, porque se te pueden revertir las cosas”.
¿Director del Conalep o franelero?
Quien ya le hace la competencia a los “graneleros” de Puebla es el director del Conalep, Francisco de Padua Flores.
Sucede que si usted transita por la calle de San Martín Texmelucan, en la colonia La Paz, no encontrará lugar dónde estacionarse, y es que hasta con huacales y cubetas el director del Conalep aparta todos los lugares posibles en la zona.
Es un verdadero “gandalla”. Ojalá no le enseñen lo mismo a los jóvenes que buscan en las opciones técnicas tener una oportunidad de trabajo. Obvio, esto no tiene nada que ver con tema educativo; en ese aspecto no hay nada que decir, por ahora.
¿Qué sabe Moreno Valle?
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