Francamente no entendemos como la sociedad sigue dejando pasar temas de trascendencia para la vida de quienes vivimos en esta entidad y país. Luego de que la semana pasada Javier Sicilia lograra lo que nadie había conseguido en este sexenio — escuchar un mea culpa de Fecal— pareciera que ya no hay más que hacer.
Los cuestionamientos han seguido mediante las redes sociales, pero los demás medios informativos dieron la vuelta a la hoja privilegiando incluso temas variados que van desde los goles de México contra EU, la detención del mentado “Chango” Méndez hasta la llegada de las reliquias de Palafox y Mendoza a Puebla, la bronca entre cirqueros del Congreso por la legitimidad de los mototaxis, así como la Marcha de las Putas. Noticias que desde luego tienen su relevancia, pero que distraen de lo que realmente debe importarnos: la reacción de los afectados.
Es decir, de todos nosotros.
Los ciudadanos que luego de una elección deseamos mejores condiciones de vida en todos los ámbitos sociales. Ya vimos que para Fecal tener una reunión con ciudadanos agraviados por las pésimas estrategias empleadas para detener al crimen organizado o socavar el poderío de los narcotraficantes en el país es suficiente para bajarle los humos a cualquiera que le critique este rubro.
Debió haber pedido perdón, levantarse y largarse, pero de la presidencia. Más de 40 mil muertes a su cuenta personal son suficiente motivo para exigir al Congreso de la Unión la inmediata remoción del mismo. No solo por incompetente, sino por imprudente y doloso.
Luego de esa reunión, lo más patético fue ver cómo pretendía generar un buen ánimo a su persona enviando 27 “tuiters” justificando estúpidamente los errores que durante todo su sexenio ha cometido un día sí y otro también.
La detención del “Chango” Méndez sigue siendo un asunto menor comparado con la existencia de cárteles de narcos que diariamente nos ¿regalan? de 3 a 15 muertitos, como para recordarle al gobierno que siguen teniendo control y poder.
La respuesta chusca y harto idiota de que Fecal no sabía nada respecto a la detención de Hank Rhon, solo evidenció lo que todo mundo sabía: la corrupción en este país no conoce límites. Y los panistas en el poder —con todo el poder desde hace 11 años— no pueden hacer nada.
Por el contrario, se han coludido hasta sofisticar la comodidad que les reditúa ser parte de esa podredumbre.
Los poblanos hemos tenido que entender que con la llegada del morenovallismo al poder estos asuntos tan obvios pasan a un quinto plano. Especialmente cuando se sabe que Moreno Valle tiene una fraterna amistad con Fecal; a tal grado que no tiene inconveniente en tender puentes de plata para todos los enviados de él. Particularmente con Ernesto Cordero, quien ha sido considerado en diferentes ámbitos político-administrativos como el borrego oficial de Fecal para proteger al verdadero caballo negro del panismo rumbo a la contienda de 2012.
Circunstancia que ha logrado bajar la presión que los panistas empezaron a ejercer sobre el impávido Gustavo Madero, a quien ya acusaban de cancerbero calderonista. Lo que ya resulta inevitable es la aplastante derrota que panistas y perredistas vivirán este próximo 3 de julio con la elección de Eruviel Ávila como sucesor de Enrique Peña Nieto.
Por eso las actitudes fanfarronas y hasta valentonas vistas durante el cierre de campaña del famélico Bravo Mena, quien pese a la compañía de sus compañeritos de partido, hizo bien en elegir la Plaza de los Mártires como escenario de lo que le espera la próxima semana.
Igual sucedió con Alejandro Encinas, quien pese a tener en ambas manos al Peje y Ebrard, sus bonos están tan escasos que solo le redituarán buenos deseos y un “siga participando”, claro, si Dios le presta vida. Yo le veo futuro, a uno como líder del PAN en el DF y al otro como sucesor de Narro Robles en la UNAM. A Eruviel lo veo tomando protesta como gobernador del Estado de México. Así de simple; así de real.
Anyway! Mientras este escenario nos ofrece la información nacional, Puebla sigue convulsionada entre las novedades que el morenovallismo ha traído consigo. Amén de expulsar de la administración pública a servidores públicos de reconocida trayectoria y experiencia, que fueron desacreditados hoscamente por el otrora mudo exmodelo de Hugo Boss y de los videos de Paulina Rubio — este muchacho, Cabalán Macari Álvaro— las involuntarias pifias del arranque sexenal han evidenciado que no todos los que arribaron con el hiperactivo Moreno Valle son gente talentosa, trabajadora ni honorable. Muchos de ellos han utilizado pretextos absolutamente frívolos para viajar al extranjero por cuenta del erario público. La mejor muestra es el tema del beato Juan de Palafox y Mendoza, a quien un nutrido grupo de nuevos funcionarios (que seguramente nunca habían brincado “el charco”) le hicieron los “honores” en Osma de Burgos. ¿Cómo para qué? Cuando pudieron ahorrarnos su dilapidación al esperar la llegada de sus reliquias a Puebla, como sucedió el pasado fin de semana. Un acto que denotó una brutal insensibilidad hacia la situación económica que se vive en la entidad. Un hecho que en su momento le será duramente reclamado al gobernador en turno.
Al final del día, queda claro que estamos como estamos porque queremos, porque no hacemos más ruido del necesario.
Porque no reclamamos hasta que el agua nos llega al cuello. Es así que los pueblos tienen el gobierno que se merecen. Si ya abrieron los ojos, no se vale reclamar ni pretender cerrarlos de nuevo. Ahora la beben o la derraman. Otros, como yo, seguiremos denunciando.
Por eso estamos como estamos
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