La operación política a favor del “delfín” del calderonismo, el exsecretario de Gobernación, Ernesto Cordero, está a todo lo que da.
Tal vez a destiempo, la administración estatal busca tratar de hacer que el delfín del presidente Calderón recupere el terreno perdido y para ello no escatiman tanto en recursos como en elementos humanos para no solo derrotar a Josefina Vázquez Mota, sino para humillarla en una plaza que supuestamente tiene ganada la diputada federal con licencia.
Para eso el Sistema Estatal DIF y su director Carlos Alberto Julián Ruiz no escatimaron en sumarse a la cruzada corderista, para salvar al “delfín” del presidente y apoyar en la encomienda de hacerse de una vez por todas de la dirigencia del PAN en Puebla.
De este modo, el joven vástago del exsecretario de Gobernación y fallido candidato a la alcaldía por el PRI en la era de Melquiades Morales Flores, no escatimó en comisionar por 15 días a personal a cargo de esta dependencia para que operen en diferentes demarcaciones de la entidad a favor de Cordero.
Son nueve los delegados del DIF que recibieron permiso por parte de Julián Ruiz, para operar en favor de Cordero; claro, con apoyo gubernamental respaldando a estos operadores. Se trata de Jairzinho Puertos Guzmán, quien ha sido encargado de operar en la zona de Ajalpan; Rodrigo Toledano, quien tiene en su manos sacar adelante a Cordero en Teziutlán; Levi Báez Mendieta, en Tlatlauquitepec; Elizabeth Pérez Rodríguez, en San Martín Texmelucan; Evelia Rodríguez García, en Izúcar de Matamoros.
También forman parte de la “Operación Cordero” Lilia García Escobar de Tecamachalco; Armando Ochoa Pagaza, comisionado a la plaza de Chiautla de Tapia; Vicente Martínez Flores, quien tiene en su manos sacar adelante la elección en Acatlán de Osorio y Verónica Sobrado Rodríguez, encargada de la plaza de Tehuacán, quien por cierto es prima del director de Alimentos del Sistema Estatal DIF, José Antonio San Martín Rodríguez.
Hay que señalar que aprovechando el viaje, Verónica Sobrado también trabaja para posicionarse en el distrito de Tehuacán, ya que tiene el sueño de ser candidata a diputada local por esta demarcación.
Insisto y aclaro que los delegados del DIF tienen permiso por 15 días, espero que sea sin goce de sueldo, para convertirse en operadores políticos a favor del “delfín” del presidente Calderón. La maquinaría a favor de Cordero, está puesta y funciona a todo vapor para tratar, reitero, no solo de hacer ganar al exsecretario de Hacienda, sino para humillar a Josefina Vázquez Mota, cueste lo que cueste.
Ganarle a Josefina y al aparato de la nomenclatura panista es la antesala para apropiarse del PAN y mantener intacto el sueño de la sucesión morenovallista de 2018. La lucha entre el panismo tradicional y el neopanismo morenovallista será a muerte, no solo se define quien será el candidato a la Presidencia de la República por el PAN, sino la viabilidad del proyecto político del gobernador.

Una precisión
Por cierto, hablando de mujeres priistas y de candidaturas, Isabel Allende es la elegida para ser la candidata del PRI a diputada federal por el distrito 8 de Ciudad Serdán, lo cual significa que el tricolor está dispuesto a entregar la plaza. Y es que como rival, Allende tendrá al actual diputado local del PAN, Inés Saturnino López Ponce, uno de los consentidos del gobernador Moreno Valle.
Pese a sus múltiples francachelas y excesos, López Ponce —expresidente municipal de Tecamachalco— hay que reconocer que cuenta con una estructura sólida en la región. Si a esto se suma la nominación de Allende como candidata por esta zona, es un hecho que el PRI entregará esa plaza en su lucha electoral.