El alcalde de Tlachichuca, Iván Jonathan Collantes Cabañas, es un tipo de cuidado. El panista es un político que gusta de no pagar sus deudas, utilizar recursos del erario público para su beneficio y no cumplir con sus promesas.
De acuerdo con el juicio ejecutivo mercantil instaurado contra Iván Jonathan Collantes Cabañas, expediente número 138/2011 del índice del Juzgado Tercero de Distrito en el estado de Puebla, revela que Collantes Cabañas el 18 de junio de 2010, con motivo de las elecciones constitucionales del 4 de julio de ese mismo año, firmó tres pagarés por dos millones de pesos, para hacer un total de seis millones de pesos.
Estos recursos, según la demanda, se invirtieron en la campaña política para obtener el triunfo en las elecciones constitucionales para presidente municipal de Tlachichuca. Sin embargo, tras ganar las elecciones y asumir el cargo, se le requirió por la vía extrajudicial el pago de los seis millones de pesos que recibió en su campaña política, sin embargo el político del blanquiazul se negó en forma rotunda e injustificada cubrir el adeudo, incluso recurrió a la intimidación y las amenazas para que el prestador desistiera de la cobranza.
Para no pagar, siendo presidente municipal panista, juró y perjuró que como presidente municipal tiene una relación directa con el gobierno estatal y puede hacer uso de condición y de su poder político para no pagar el adeudo.
Ante tal situación, se promovió un juicio ejecutivo mercantil en ejercicio de la acción cambiaria directa. El día 31 de octubre de 2011 el Juzgado Tercero de Distrito dictó mandamiento judicial para que el deudor, Iván Jonathan Collantes Cabañas, fuera requerido por la cantidad de dos millones de pesos que corresponden al pago vencido y no pagado del adeudo por un total de seis millones de pesos.
El 3 de enero de 2012 se efectuó la diligencia de requerimiento de pago embargo y emplazamiento en las oficinas del palacio municipal de Tlachichuca, en donde una vez más Iván Jonathan Collantes Cabañas se negó ante el funcionario judicial a realizar el pago; por lo que en cumplimiento al mandamiento judicial se le embargó el inmueble de su propiedad que se identifica como el predio fusionado con una superficie de 200 metros 393 decímetros cuadrados, conformado por la fracción de terreno que se ha segregado de la fracción del predio urbano ubicado en el Parque Limón 4 de Tlachichuca.
Así como la casa número 4 de la calle Parque Limón —de la misma población—, inscrita bajo la partida número 581 a fojas 146, tomo 97 del libro uno, quedando su copia agregada a fojas 7348, libro uno, quedando su copia agregada a fojas 7348 a la 7377 del libro quinto tomo 97, de fecha 6 de julio de 2011 del Registro Público de la Propiedad y del Comercio de Ciudad Serdán, mismo que es de todos conocido se trata de la casa que actualmente se encuentra en construcción a un costado del palacio municipal.
También le fue embargada la casa que se ubica en Privada Ayuntamiento 4, letra A, con una superficie de 600 metros cuadrados, así como otras propiedades que ha adquirido y se presume en su círculo de poder del ayuntamiento.
Aún más.
Algunos regidores, en forma manifiesta, expresaron su inconformidad al ser compelidos a firmar actas de cabildo en las que se autoriza cantidades de dinero para un fin lucrativo personal del presidente municipal y no para obra pública, como públicamente trata de hacerlo creer. De un documento firmado por regidores del ayuntamiento de Tlachichuca para el ayuntamiento 2011-2014 se desprende que el alcalde panista está adquiriendo propiedades, automóviles y demás bienes.
En ese sentido, el presidente municipal panista realizó todas las maniobras legales para tratar de evitar de que se les embargaran y sirvan de garantía para cumplir con su obligación.
Dentro del término legal que le fue concedido para oponerse a la ejecución, el presidente municipal Collantes Cabañas en escrito del 16 de enero de 2012 reconoció haber suscrito los tres pagarés por un monto de dos millones de pesos, que suman seis millones de pesos, de un préstamo que le fue otorgado con la finalidad de invertirlo en su campaña política para presidente municipal de Tlachichuca.
En su defensa el alcalde panista mintió porque arguye que dicho recurso no lo recibió y que únicamente es un compromiso de campaña para que una vez obtenido el triunfo electoral implementaría en beneficio de la asociación civil denominada “Somos la Fuerza Ciudadana” AC, misma que está integrada por ciudadanos de Tlachichuca, programas de vivienda, suministro y mejoras al sistema operador de agua potable, proyectos productivos al campo y demás beneficios de obra pública.
En el acuerdo con la asociación “Somos la Fuerza Ciudadana”, representada por Jorge Rogelio Torres Robles se comprometió a hacer acciones en favor de esta asociación, pero éstas tampoco se han cumplido, lo que constituye un reclamo social.
Sin duda, éste es el cambio que prometieron los panistas.
¿Por qué las autoridades electorales no fiscalizaron esos recursos?
¿Por qué el Órgano Superior de Fiscalización no hace nada ante las denuncias?
¿Qué hará el Congreso del estado para evitar que el alcalde panista siga violando la ley?
¿Realmente tendrá la protección de las autoridades estatales para evitar el pago?
¿Qué hará la Secretaría de Desarrollo, Evaluación y Control de la Administración del estado de Puebla?
Veremos y diremos.
La cloaca del edil panista de Tlachichuca
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