Eres un emprendedor exitoso cuando tu negocio surge y empieza con el pide correcto, cuando te encaminas a dejar de ser emprendedor para convertirte en empresario. Pero el camino lo va marcando la experiencia propia, es por eso que el día de hoy quiero hablar de las competencias a desarrollar para convertirnos en ese empresario que desea efusivamente salir.
En primer lugar debemos entender que un emprendedor es aquel que desarrolla una idea en base a un sueño empresarial, y que lleva a cabo esa idea en forma de plan para asegurar su éxito y convertirse en empresario. El emprendedurismo es la mentalidad de siempre innovar y desarrollar nuevas estrategias de negocio aunque sea en uno ya existente, mientras que el emprendedor es la persona que aplica esas ideas y desarrolla el talento del emprendedurismo.
Cuando empezamos a desarrollar una idea en primer lugar debemos pensar en papel, en otras palabras, muchas veces tenemos una idea a las ocho de la mañana, pero el ajetreo de la vida diaria nos distrae provocando la perdida de la idea inicial que tuvimos en la mañana, es por eso que lo que recomiendo es anotarlo. El segundo paso de esta competencia es claro: dedícale tiempo a desarrollar el plan a seguir para que esa idea se convierta un una realidad tangible.
Algunos de los aspectos importantes del buen emprendedor varían con base a los recursos que lo conforman o los que nosotros utilizamos. En este punto quiero ser claro al mencionar que nosotros mismos atraemos los recursos que deseamos, por ello cada emprendedor desarrolla sus propias competencias y de muy diversas maneras.
Pero, ¿con qué recursos podremos contar?:
a)    Económico: El saber administrar nuestro dinero, así como el al conocimiento del ahorro nos traerá satisfacciones particulares y será la base de nuestra empresa. Conocer los sistemas de ahorro, inversiones y bancarios que nos puedan ayudar a expandirnos es una buena herramienta para alcanzar el éxito.
b)    Humano: A este recurso en particular nos referimos a todas las personas que nos pueden ayudar a realizar nuestra idea en un negocio exitoso: padres, amigos, inversionistas, entre otros; así como los empleados y colaboradores que día a día constituyen la vida de nuestro negocio (networking).
c)    Intelectual: Son los cursos, talleres, preparación académica, libros y todo aquello que aporte conocimientos para el crecimiento de nuestro negocio, que en conjunto con nuestra creatividad nos aporta más que experiencia, nos genera madurez y solidez, convirtiéndose en el pilar mas importante del emprendedurismo.
d)    Coaching: El método más poderoso para mejorar el rendimiento de las personas, y que lo lleva a alcanzar lo mejor de sí mismo es el coaching: una relación profesional y continua para obtener resultados extraordinarios en la vida del emprendedor, en sus relaciones, en su profesión, en su empresa o en su negocio.
La buena utilización de los recursos favorece y fortalece la planeación de objetivos y de sus pasos a seguir, todo esto nos arroja la primera competencia que es el emprendedurismo.
Ahora bien, ¿cómo podemos desarrollar más competencias? Para responder esta pregunta debemos tener el claro cuál es nuestro objetivo y cómo vamos a llegar a él. De esa manera conoceremos cuáles son las habilidades y talentos que necesitamos explotar.
Como coach de emprendedores, el desarrollo de sus talentos y sus competencias, en lo personal, es primordial, ya que durante el proceso de convertirse de emprendedor a empresario deben potenciar sus habilidades para no salir del camino y lograr confrontar de manera exitosa todas las circunstancias favorables así como las desfavorables que durante el proceso de crecimiento van surgiendo.