Estamos a sólo cinco días de que Puebla celebre los 150 años de la Batalla del 5 de Mayo. Para este momento deben estar casi listas las obras que acompañarán a la celebración que la revista Proceso califica como un “despilfarro monumental”. De hecho, los más de 3 mil millones de pesos que se dicen van a ser “la cuenta de la pachanga” ya se encuentran debidamente repartidos. Sin embargo, el lector estará de acuerdo si le digo que lo que aún no se limpia es la justicia en Puebla.
Le comentó lo anterior porque las manos del Poder Judicial, por lo menos en la zona de Atlixco, están llenas de boñiga, luego de que dos comerciantes, conocidos por su honestidad —incluso uno de ellos exdiputado panista— se encuentran presos desde el jueves 19 de abril, bajo una absurda acusación de chantaje que fue mal integrada por el Ministerio Público de Atlixco y peor estudiada por el Juzgado de Primera Instancia, a cargo de Elmo Mayoral Bello, quien “al vapor” giró la orden de aprehensión en contra de dos hombres que por sus filiales políticas debieron haber votado por Rafael Moreno Valle, pero quienes en la actualidad duermen en las mazmorras.
Estos dos hombres —Miguel Gutiérrez González y Gerardo Arturo Rivera García— lo único que quieren es que su exsocio Alejandro Corona López les rinda cuentas de un negocio que emprendieron juntos. Como consecuencia los metieron presos, al fiel estilo de un gobierno represor.
Lo peor —o lo que confirma esta represión, a sólo cinco días de la fiestota— es que Alejandro Corona, el socio transa, es esposo de la diputada panista Myriam Galindo Petriz, la verdadera dueña de la funeraria Cristo Rey de Puebla quien en sus inicios tenía un modesto local frente al Panteón Municipal, pero que “gracias a los muertos” y al contubernio que tiene este negocio con la agencia del Ministerio Público de Homicidios, de la Procuraduría General de Justicia, además de uno que otro hospital, ha multiplicado sus ganancias. Lo malo es que nuestras leyes no son como las de Estados Unidos. De ser así estos personajes estarían formados atrás de Walmart.
Toda esta suciedad legal —que no sólo se huele en Atlixco— mantiene a muchas personas en prisión por delitos que les fueron “sembrados”, lo que ha demostrado que la Procuraduría General de Justicia (PGJ), además de la Secretaría de Seguridad Pública de Puebla, se han convertido en el “brazo represor” del gobierno en plena fiesta.
Sólo un par de preguntas: ¿Puede uno sentarse a celebrar que se ganó una batalla cuando el cumplimiento del derecho está en el piso? ¿Cuantas víctimas suma este gobierno en escasos dos años, cuántos han sido encarcelados por malas investigaciones, hechas a propósito o por negligencia?
Sería interesante saber qué respuesta le va a dar este gobierno a los comerciantes y empresarios políticos de Atlixco. A final de cuentas uno de los más importantes bastiones políticos del Partido Acción Nacional.
¿Y Valle Fantástico, apá?
En la página 34, en el tercer párrafo del reportaje titulado “Despilfarro monumental con pretexto histórico”, firmado por Gabriela Hernández, de la revista Proceso del 29 de abril, la periodista escribe:
“Una tercera obra que forma parte del paquete conmemorativo —refiriéndose al despilfarro— es la creación del Ecoparque Metropolitano en los terrenos de Valle Fantástico. El gobierno estatal invirtió 200 millones de pesos en un terreno en litigio desde hace un año con el empresario Ricardo Henaine, propietario del equipo de fútbol Puebla.”
No es difícil de entender que el gobierno del estado se está gastando los impuestos de Puebla “en un volado”, que le está metiendo todo el dinero a un proyecto del que está muy distante de ser ganador.
Actualmente las obras para la creación de este parque continúan, pese a que de manera oficial —y conste que digo oficial— no aparece nada escrito firmado ni avalado por la juez Segundo de Distrito, donde indique “no existe ningún problema” de que se siga construyendo en un terreno que no sólo está en medio de un litigio, sino en medio del análisis de un amparo.
Imagine el lector que hoy el gobierno se saca de la manga una aprobación de este tipo, ¡vaya!, que en este momento sea declarado virtual poseedor de esa propiedad. ¿Estaría usted de acuerdo con un servidor de que este gobierno tiene las leyes, y a quienes las representan, comiendo de su mano?
Ver para creer.
Nos vemos cuando nos veamos.
Los renglones torcidos en el Poder Judicial
PUBLICIDAD