Luego de lo sucedido en el antro Zuntra en San Andrés Cholula, quedan muchas interrogantes en materia de protección civil.
En primera instancia, ¿por qué cuándo hay una contingencia de este tipo, simplemente Jesús Morales, titular de la dirección de Protección Civil estatal desaparece?
Y es que este funcionario no contesta su teléfono celular y se esconde de la prensa cuando más información debe de dar para que esta sea comunicada a la población. Es por sentido común.
Dicen que tiene tapabocas.
Pero, más bien, dicen que se lo coloca él solito ante la ignorancia de temas.
Pasó con el incendio del bar Zuntra, pasó con la explosión de la gasera de Tomza.
Otra duda que surge es simple, ¿quién autorizó en San Andrés Cholula abrir “antros” con techos de palma? ¿No saben que es inflamable? Es de sentido común.
Todo, independientemente que los globos de cantoya están de moda y se ven muy bonitos en el cielo.
La bronca es cuando caen. Nadie sabe dónde puede ser.
¿Sabían que en los países orientales se utilizan en ríos o mares? Así se evitan incendios. Otra vez, sentido común.
Mientras tanto, Jesús Morales está dejando mucho qué desear en su trabajo, y cuando se le complican las cosas simplemente hace “operación avestruz”. Sin el más sentido común.
 
El comisionado
Lo siguiente lo escribimos en abril en este espacio; ahora, a seis meses, estalló la “bomba” en la CAIP por los temas de transparencia, al grado que llegó el tema al Congreso del estado y todo por haber negado burdamente las facturas de los helicópteros propiedad del gobierno estatal:
“Esta semana tuvimos la oportunidad de entrevistar al más controvertido integrante de la Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIP), Federico González Magaña.
”En esta entrevista que nos concedió amablemente, se pudo notar que aún no se quita el traje de sujeto obligado el cual portó durante dos años cuando era delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
”Y es que se la pasó defendiendo a ultranza a los sujetos obligados y, por ende, al gobierno estatal.
”Siempre pensando más en el bienestar de los sujetos obligados que en los solicitantes y su derecho a la información.
”Aunque reconoció varias estrategias de las dependencias para estirar la liga en la ley de transparencia, las minimizó.
”Algo de lo que dijo es muy cierto, está hípervigilado y seguirá así por lo menos en lo que resta del sexenio”.
Ahora González Magaña está en el banquillo de los acusados más pronto de lo esperado.
Independientemente de que el Congreso estatal no lo va a llamar a comparecer, a los ojos de un gran sector de la sociedad ya hay un veredicto: Culpable de fomentar la opacidad.