En la ciudad de Puebla actualmente opera una banda de colombianos que se dedica a los robos violentos a casa habitación.
La organización delictiva no sólo cuenta con personal que se encarga de amagar, golpear e interrogar a sus víctimas, sino que además tiene personal especializado para abrir cerraduras con el más absoluto sigilo para sorprender a sus víctimas, sobre todo cuando están durmiendo.
Los delincuentes más violentos que forman parte de esta banda son un alto, robusto y otro más bajo, moreno, que tiene el acento y maneja los diálogos; son de Colombia.
Esta banda opera en zonas residenciales de la ciudad de Puebla, tiene gente que se encarga de investigar a sus víctimas, el monto de cada uno de sus asaltos se suma en millones.
Tienen protección policíaca, donde llegan a operar curiosamente se relaja la vigilancia.
Los últimos asaltos que perpetraron fueron en la colonia América Norte.
Son capaces de ingresar a una propiedad sin hacer un solo ruido, generalmente los asaltados asegurar que al despertar ya tenían el cañón de un arma apuntándoles al rostro.
Esta organización tiene mucho tiempo operando, ningún habitante de la ciudad de Puebla está enterado de esta banda por una sencilla razón: este gobierno le oculta a los poblanos lo que realmente ocurre en materia de seguridad pública y en muchas otras cosas.
Aquí en Puebla se maquilla la sangre, por esto mismo los poblanos ignoran la presencia de bandas como los colombianos.
Ocultar la verdad de la inseguridad que se vive en Puebla es peligroso, porque los habitantes tienen una venda en los ojos, les dicen que “todo está bien”, aunque en realidad alguien, desde lejos, les apunta con un arma.
Los chiripazos cuentan
La Policía Municipal de San Andrés Cholula detuvo, en una de las calles del fraccionamiento Santa Teresa, a Lorena Vargas Zurieta, de 30 años de edad, de nacionalidad colombiana, quien iba a bordo de una camioneta Mazda de modelo reciente, con placas sobrepuestas.
Se supone que esta mujer habría participado en un asalto a una residencia y que sus cómplices habían logrado escapar.
La mujer quedó a disposición de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), tal vez esto sirva para conocer las operaciones de la banda de colombianos.
Secretario con suerte no es secretario
Por cierto, la detención de esta mujer colombiana le cayó bien al nuevo secretario de Seguridad Pública de San Andrés Cholula, don Manuel Alonso, quien esté lunes va a ser presentado oficialmente.
Manuel Alonso sustituye a Azucena Yazmín Vázquez Rodríguez, una de las consentidas del secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas.
Este cambio representa un golpe a la administración de don Facundo, quien utilizó a todo su equipo de colaboradores para colocarlo en zonas estratégicas de seguridad pública, en Puebla y en todos sus municipios cercanos, donde la sombra del crimen organizado está presente y donde los cuerpos de seguridad han sido rebasados por la delincuencia.
¿Por qué será?
Maquillaje a la trata
Judith, una mujer que hasta hace pocos días se ganaba la vida como bailarina de table dance, envío una carta a esta columna.
La mujer dice que antes de ser “rescatada” de “explotación sexual” por la PGJ ganaba como mínimo 2 mil pesos diarios realizando bailes privados; nadie la tocaba si ella no lo permitía, no tenía que tener sexo; estaba segura en el cabaret que fue cerrado.
Ahora se tiene que prostituir vía telefónica, en la calle y donde se pueda, expuesta a una agresión.
La mujer lo comenta, y es cierto que existen bandas que se dedican al robo de menores que luego son obligadas a ejercer la prostitución, de organizaciones que utilizan a menores para prostituirlos, estas bandas no han sido ni siquiera molestadas.
Cheque las estadísticas de “las salvadas”, todas provienen de bares que llevaban años operando, de “ajustes de cuentas” disfrazados de operativos, luego le cuento por qué.
Nos vemos cuando nos veamos.
